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Biden advierte a Putin de represalias económicas si invade Ucrania

La Casa Blanca coordinó las medidas con sus aliados europeos antes de la videoconferencia entre los dos líderes

El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, advirtió este martes a su homólogo ruso, Vladímir Putin, de muy graves consecuencias económicas si acaba ordenando una invasión a las tropas que amasa ante la frontera de Ucrania. En una conversación por videoconferencia que se prolongó dos horas, Biden dijo que en la amenaza de sanciones le acompañan sus socios europeos. Antes y después de la conversación con Putin, Biden consultó con los líderes de Reino Unido, Alemania, Francia e Italia.

Según dijo el consejero de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Jake Sullivan, Biden fue «claro y directo» con Putin. «Le dejó claro que si Rusia vuelve a invadir Ucrania, habrá fuertes medidas económicas tanto de EE.UU como de sus socios europeos, y seguirá ofreciendo material de defensa a Ucrania, más del que ya le suministra, y está dispuesto a asistir en la fortificación de los aliados de la OTAN en su flanco oriental».

Hace apenas siete años Rusia se anexionó la península de Crimea, y desde entonces el Kremlin ha fomentado el separatismo en el este de ese país al que considera un satélite propio.

Antes de hablar con Putin, Biden conversó el lunes por teléfono con sus homólogos en Reino Unido, Boris Johnson; Francia, Emmanuel Macron; Italia, Mario Draghi, y Alemania, Angela Merkel. Según la Casa Blanca, volvió a consultar con ellos inmediatamente después de la llamada, para coordinar posiciones. Después el presidente comunicó el contenido de su conversación a los líderes del Capitolio y el jueves conversará con el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski.

Sullivan dijo en rueda de prensa en la Casa Blanca que de momento EE.UU. no se plantea el envío inmediato de tropas a la zona de Ucrania ya que, según dijo, ya hay soldados estadounidenses en Polonia, Rumanía y otras rotaciones en otros socios de la OTAN. «Lo importante ahora no es eso, sino qué apoyo material requieren nuestros socios para mantenerse fuertes en el caso de que Rusia hiciera ese movimiento de entrada en Ucrania», dijo.

La inteligencia de EE.UU. concluyó recientemente que Putin planea amasar un total de 175.000 soldados para una posible invasión que podría iniciarse tras el año nuevo, aunque no está claro todavía que ésta se vaya a ejecutar. Una de las opciones que baraja la Casa Blanca es que esa escalada de tropas sea simplemente una maniobra de Putin para lograr concesiones en otros puntos de su agenda.

El encuentro entre ambos mandatarios tuvo lugar por una videoconferencia segura. Comenzaron a las 10:07 hora de Washington (las 16:07 en la España peninsular) y acabaron ocho minutos después del mediodía. En esas dos horas no hablaron solo de Ucrania, según dijo después la Casa Blanca, sino también sobre Irán y su programa nuclear y los ciberataques y otros delitos de internet.

La anexión de Crimea

En 2014, cuando Biden era vicepresidente de Barack Obama, Putin invadió Ucrania y se anexionó Crimea, sin que EE.UU. o sus aliados europeos lo impidieran. Desde entonces, el Kremlin ha estado fomentando el conflicto en las provincias de mayoría separatista en el este ucraniano, con la estrategia a largo plazo de impedir más acercamientos de Ucrania a Europa y la Alianza Atlántica.

Desde que llegara a la presidencia, Biden se ha visto con Putin una vez, en junio, en Ginebra, sin cerrar grandes acuerdos. La relación entre ambos países no atraviesa uno de sus mejores momentos. Biden, de hecho, no ha invitado a Putin a una gran cumbre de democracias, en la que tampoco están China, Egipto, Turquía, Hungría, Cuba, Venezuela, El Salvador o Guatemala, y que se celebra jueves y viernes. El Kremlin ha protestado, acusando a Biden de «unilateralismo» en su concepción de las relaciones internacionales.

En abril, tras la publicación de un informe de la inteligencia estadounidense que acusó directamente a Putin de haber autorizado una campaña de injerencias digitales en las elecciones de 2020 para perjudicar a Biden y beneficiar a Trump, el presidente de EE.UU. fue preguntado en una entrevista por esas maniobras y dijo que Moscú «pagará las consecuencias».

Después, a Biden se le preguntó si cree que Putin es un «asesino», tras la persecución y envenenamiento de líderes opositores, incluido Alexéi Navalny. El estadounidense respondió que sí, sin repetir la palabra. El Kremlin llamó después a consultas a su embajador.

Trump mantenía excelentes relaciones con Putin. Se vio con él cinco veces, la primera en julio de 2017, seis meses después de jurar el cargo. Ambos mandatarios hablaron por teléfono en al menos nueve ocasiones. En la mayoría de esas conversaciones Trump prefirió hablar en privado sin presencia de diplomáticos. En alguna ocasión hasta prohibió a los intérpretes que tomaran notas.

El fiscal especial Robert Mueller halló en su informe sobre las injerencias rusas que el Kremlin tuvo en pie dos campañas para manipular las elecciones de 2016 y que Trump derrotara a Hillary Clinton.

Según dijo la portavoz de la Casa Blanca, Jen Psaki, «hemos consultado ampliamente con nuestros aliados y creemos que tenemos un camino a seguir que impondría un daño significativo y severo a la economía rusa». «Pueden llamarlo amenaza. Pueden llamarlo hechos. Pueden llamarlo como quieran», añadió.

Sullivan, el consejero de Seguridad Nacional, añadió que Biden no se comprometió a impedir que Ucrania ingrese en la OTAN, «porque cree que cada país debe tomar sus propias decisiones». Esa es una de las exigencias de Putin para evitar la invasión rusa que teme EE.UU.

 

 

 

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