A Delgado “le faltó contundencia” y Orsi “fue a cuidarse mucho”, dijo experto en campañas
Federico Irazabal consideró que el debate de este domingo fue “muy aburrido desde el punto de vista del entretenimiento político”.
El pasado domingo tuvo lugar el debate presidencial entre los dos candidatos que se enfrentarán el domingo próximo en el balotaje.
De pie cada uno en un atril a poca distancia entre sí, Álvaro Delgado y Yamandú Orsi recorrieron los cinco capítulos acordados previamente por las dos partes: desarrollo humano, seguridad, economía, educación e innovación, y trabajo y seguridad social.
Mientras tanto, Delgado enumeró logros de la presidencia de Luis Lacalle Pou y afirmó que quería profundizar los avances obtenidos en varias de sus políticas, por ejemplo, la caída de varios indicadores de criminalidad. Pero, al mismo tiempo, criticó en numerosas ocasiones al Frente Amplio, por sus gobiernos, por su actitud en la oposición en estos cinco años y por pasajes de las bases programáticas. También recurrió en ocasiones a mostrar capturas de pantalla de declaraciones de Orsi que consideraba contradictorias. Delgado reiteró que su gobierno sería menos “ideologizado” que uno del FA.
A lo largo de sus intervenciones, Orsi enumeró propuestas de su campaña, destacó logros de los 15 años de gobiernos del Frente Amplio y se apoyó en su gestión en la Intendencia de Canelones. Por ejemplo, en el capítulo de desarrollo social, al referirse a las cárceles recordó experiencias positivas de trabajo con exreclusos encaradas en su departamento. También cuestionó varios resultados de esta administración, por ejemplo, sobre la lenta recuperación del salario real, el atraso cambiario, el recorte de dos puntos en la rebaja del IVA para compras con tarjeta de débito, o en materia educativa.
Al cierre, ambos hicieron hincapié en que lo que está en juego en el balotaje son dos modelos de país.
Delgado afirmó que el suyo sería «con certeza, con garantías y con libertad”, y se valió de su experiencia para preguntar a los votantes a quién querrían tener al frente del gobierno si Uruguay vuelve a atravesar una crisis como la de la pandemia.
Orsi, a su tiempo, calificó al proyecto de su oponente como “el de las promesas incumplidas” y al suyo como “el país de los compromisos”. Habló de “cambio seguro”, y tomó el que viene siendo su eslogan en este tramo final de campaña: “Sabremos cumplir”.
De acuerdo con el analista Federico Irazabal, se trató de un debate “muy aburrido desde el punto de vista del entretenimiento político”.
“El entretenimiento político es algo que hoy quienes trabajamos en esta área tenemos que cuidar mucho, porque tratamos con audiencias que hoy no aguantan 30 segundos frente a una pantalla”, expresó el sociólogo y consultor político.
De acuerdo con Irazabal, al público actual “si algo no le interesa, enseguida cambia”.
“Tal vez el formato no ayudó mucho para lograr ese objetivo de mantener a la gente enganchada, las pausas eran demasiado largas”, consideró, por fuera del desempeño de los candidatos.
“Hay otros modelos de debate que podrían haber aplicado, sobre todo en esta instancia donde tenemos a algunos indecisos, que van más por el lado del público menos informado e interesado en el tema político. Ahí es donde había una parte de los votos que ambos candidatos debía intentar convencer y creo que eso no los ayudó demasiado”, analizó.
Si bien el formato del debate fue acordado de esa manera por los comandos, desde filas oficialistas expresaron que el motivo de esa falta de enfrentamiento vino del lado del comando de Orsi.
“En esto en general el que va primero no quiere ir al debate y el que va segundo quiere ir y quiere que haya un debate más picado para que él pueda meter sus temas y pueda, de alguna forma, intentar descontar la ventaja”, dijo y apuntó a que, aunque la ventaja que le dan las encuestas al presidenciable del FA es “muy leve”, Orsi “está buscando cuidarse más”.
Tras esto, Irazabal hizo referencia a la actitud de los candidatos. “Si hubiese habido una mampara entre los dos atriles, ninguno se enteraba de que el otro estaba ahí”, expresó y añadió que “hubo muy poca confrontación”.
“Delgado tuvo un tono más buscador, Orsi estaba como si estuviera en una conferencia de ADM en donde van los candidatos y exponen sus propuestas y sus áreas de trabajo”, consideró y sumó: “De hecho, Delgado lo nombra mucho más a Orsi al inicio del debate buscándole el pie. Diciendo: ‘Esto Yamandú Orsi lo sabe’ y Orsi nunca levanta el guante, fue a cuidarse mucho”.
El especialista consideró que “ninguno aprovechó para dejar en evidencia al otro ni recoger las propias declaraciones”.
“Me parece que fue tan preparado el debate. Esto es como cuando íbamos a dar el examen y estudiábamos de memoria. Entonces, el profesor te preguntaba alguna cosa por fuera de lo que habías estudiado y había dificultades para poder meterse en ese tema y poder dar una buena respuesta. Fueron muy a lo suyo cada uno”, dijo Irazabal.
A continuación, aludió a que el candidato frenteamplista enfatizó en que no subirá impuestos en caso de ser presidente. “A Orsi me parece que se le salió en ese momento el libreto y trató de meter una frase interesante”, consideró.
Por su parte, dijo que Delgado “buscaba y buscaba” pero “le faltaba la contundencia del golpe final”.
“Intentaba buscar las comparaciones, buscaba mucho esos contrastes entre las incertidumbres de lo que pudiera ser un gobierno del FA, el retroceso, etcétera, pero le faltaba ese toque final como para darle contundencia a ese discurso”, expresó.
Luego calificó al discurso tanto de Orsi como de Delgado de “monocorde y aburrido”. “Es parte del estilo que tienen ambos candidatos”, amplió. “Son candidatos muy parecidos entre sí en sus estilos y eso también iba a hacer que la campaña fuese muy difícil y tediosa”, valoró.
Ambos venían con estrategias bastante marcadas: Delgado tenía que venir a tratar de descontar esa ventaja que le lleva Orsi y Orsi tenía que jugar a no equivocarse, al 0 a 0.
Y los dos cumplieron bastante bien con sus estrategias.
En esta línea, dijo que si uno se pregunta quién ganó y quién perdió, según Irazabal, “los dos ganaron un poquito”. “Hay que ver después, al pasar la raya final, si ese poquito que ganaron sigue manteniendo las ventajas o no”, evaluó.
“Como Orsi tiene una ventaja y los dos ganaron algo, me parece que la situación queda igual que como entraron”, sentenció.