Ana Cristina Vélez: Lo mejor del 2021
Para despedirnos del año es divertido hacer memoria y tratar de recordar qué fue lo que más disfrutamos en artículos, ideas, performances, para que otros puedan gozarlos también.
La película que más me gustó fue El poder del perro, en Netflix. Una obra de arte, sutil conmovedora, bella y profunda. Dejemos que las palabras de Aldous Huxley expliquen la razón de fondo de mi apreciación:
En materia de arte, «ser sincero» es sinónimo de «poseer los dones de comprensión y expresión psicológicas». Todos los seres humanos sienten las mismas emociones; pero pocos saben exactamente lo que sienten o pueden adivinar los sentimientos de los demás. La percepción psicológica es una facultad especial, como la facultad de comprender las matemáticas o la música. Y de los pocos que poseen esa facultad, sólo dos o tres de cada cien nacen con el talento de expresar sus conocimientos en forma artística.”
Jane Campion, su directora, tiene esos dones, sin duda. ¿Quién es ella? (Nueva Zelanda, 1954) “Es una de las directoras de cine neozelandesas más conocidas en el mundo, aunque la mayor parte de su trabajo lo ha realizado fuera de su país, principalmente en Australia (donde reside) y los Estados Unidos. Es una de las siete mujeres que han sido nominadas al Óscar como directoras de cine.” (De Wikipedia)
La novela que más me gustó fue Algo brilla como el mar. Hiromi Kawakami es una escritora japonesa, con una escritura delicada e interesante. Sus novelas son sencillas y cuentan historias en las que no pasan muchos sucesos. Es en su capacidad perceptiva donde se aprecia su habilidad, y en los detalles imperceptibles que ella ve, donde se encuentra la magia y el encanto de su escritura. Después de leer El cielo es azul, la tierra blanca decidí leer todo lo que escribiera y hubiera escrito. Nunca me ha decepcionado o aburrido.
Un buen resumen de esa novela aquí
Entre los libros de no ficción más interesantes que leí estuvieron Pecados muy humanos, cuyo autor es mi papá, Antonio Vélez; Otro fin del mundo es posible, de Alejandro Gaviria y Racionalidad. Qué es, por qué escasea y cómo promoverla, de Steven Pinker.
El libro Pecados muy humanos contiene una colección de ensayos muy divertidos e interesantes, salpimentados de humor, crítica, ciencia y filosofía. Entre los ensayos que dan nombre al libro están: La corrupción, La venganza, El perdón, Nuestros Jekyll y Hyde, El egoísmo, El altruismo, El peligro del testimonio como verdad. Del tipo que uno podría llamar picos de la inteligencia y sus efectos en el mundo están: Momentos estelares de la ciencia, El transistor, maravilla moderna, Impacto de Internet, El ADN. Pero como somos imperfectamente racionales, el autor revisa asuntos como si ¿Existe vida inteligente sobre la Tierra?, si Julio Cesar, Alejandro Magno y Napoleón que son héroes de la Historia, no deberían ser vistos como asesinos. Mi papá los llama “Los tres diamantes”. Hay un ensayo sobre la Estupidez humana, sobre la bomba de Hiroshima, que se llama No tiene perdón, sobre la imagen de algunos dictadores actuales, sobre el alma y la química, sobre la religión y el realismo mágico, sobre creencias en las medicinas celestiales y sobre las leyes que rigen las coincidencias. También hay reflexiones sobre aspectos diversos de la lengua que hablamos y escribimos en los ensayos titulados, Academia Española, Vicisitudes de nuestra lengua materna y Apodos.
Este es el link al libro Pecados muy humanos en el catálogo online de la editorial Universidad de Antioquia: https://link.udea.edu.co/libro?q=2-15-1-9543-1
El libro de Alejandro Gaviria Otro fin del mundo es posible me gustó tanto que escribí tres Catrecillos sobre este. Aquí están los enlaces para quienes estén interesados:
Reflexión sobre las reflexiones en Otro fin del mundo es posible. Parte I
Reflexión sobre las reflexiones en Otro fin del mundo es posible. Parte dos
Crisis ambiental y educación. Reflexiones sobre Otro fin del mundo es posible. Parte tres
Racionalidad. Qué es, por qué escasea y cómo promoverla es un libro de una importancia innegable. Creo que llegará a ser utilizado en los colegios como guía para educar la capacidad de razonar bien de los jóvenes. Todos razonamos, pero para hacerlo bien hay que aprenderlo; por ejemplo, sin tener nociones de estadística estamos muy limitados para entender la realidad. Prácticamente, todos los libros de Steven Pinker han sido Best Sellers en no ficción.
Racionalidad. Qué es, por qué escasea y cómo promoverla: aqui
Aquí Steven Pinker en una entrevista para la BBVA, que sirve como abrebocas: El reto de ser racionales, con traducción al español
Entre los mejores artículos de prensa del año —dejando por fuera los extraordinarios artículos de Daniel Coronell, pues todos son importantes— estarían:
De Ricardo Bada: El alfabeto Ario. No me pierdo su diario de cada semana, en Fronterad.
Cuenta tus bendiciones, de Marcos Villasmil. Me fascinó, es un artículo bello, impecable estéticamente y profundo, además de que está lleno de información valiosa.
“¿Cómo es posible que tantos venezolanos -teóricamente unidos por la lucha contra la tiranía- no podamos entendernos sin necesidad de atropellarnos, de tratar de imponer una supuesta “superioridad” sobre los demás? Con hogueras no se construyen naciones.”
No me pierdo las columnas de Carlos Granés, y este año, las que más me gustaron fueron:
El lenguaje inclusivo se lo inventaron para excluirte a ti.
y La feria de las identidades y la traición de los intelectuales
En Ballet, fue un artículo de Carlos Granés, Papaioannou y la belleza, en su columna en El Espectador, el que me llevó a ver los videos del bailarín y coreógrafo Dimitris Papaioannou. Este párrafo de Granés me sedujo:
“Nada más euforizante que un artista capaz de producir arrobo y sorpresa y conmocionar los sentidos y arrancar del tiempo y del espacio para llevar al espectador por espacios minimalistas y modernos, escenas míticas y sensuales, y dejarlo finalmente postrado y extasiado ante un atardecer en una playa del Mediterráneo.
Papaioannou logra esa impresionante gesta en su última obra, Transverse Orientation, en la que vuelve a deslumbrar con su habilidad para fusionar los cuerpos entre sí y con los objetos, también con el escenario, para crear criaturas mitológicas, seres híbridos y andróginos, sensuales y etéreos, que al mismo tiempo remiten al pasado arcaico de la civilización occidental y a su presente incierto, incluso a un futuro de seres-polilla fascinados por tecnologías nocivas y averiadas. Los bailarines son ejecutivos modernos a los que les basta desnudarse para convertirse en esculturas, en mitología o en ideales clásicos de perfección y armonía. Y lo mismo ocurre con el escenario, que empieza siendo una bodega minimalista, muy aséptica y racional, y que poco a poco se va agrietando y destruyendo hasta convertirse en un espacio natural, lleno de agua y rocas: una playa eterna del Mediterráneo.”
De Ángeles Mastretta: Tiempos improbables
Mi personaje del año: Noam Chomsky. Cumplió 93 años el siete de diciembre de este año; quién sabe cuántos de lucha intelectual, buscando un mundo mejor. Todavía inteligente, lúcido y enfático. Es y ha sido un ejemplo de seriedad, de compromiso, de coherencia. Siempre me ha encantado su falta de vanidad y su sencillez. Claramente, lo que hace, lo hace sin querer ni esperar aplausos de nadie, lo hace porque es una persona profunda y compasiva, que entiende la realidad política del mundo y lucha por cambiar los errores que ve. No se ha equivocado en sus predicciones, es un hombre sabio.
No se pierdan las entregas del fin de semana del blog América 2.1. Felicidades 2022