Bueno para la libertad, malo para Pekín y la seguridad
Es previsible que el régimen comunista que encabeza Xi Jinping encaje mal la victoria en Taiwán del partido más alejado de Pekín
La holgada victoria del candidato que más alejado se encuentra del régimen de Pekín en las elecciones de Taiwán es sin duda una buena noticia para la libertad, pues es el único lugar del gigante asiático (China insiste en que es una provincia más) donde se celebran elecciones y los ciudadanos deciden su futuro. Que el ganador (actual vicepresidente) persiga continuar en la senda del soberanismo prolonga el inquietante y delicado ‘statu quo’ que mantiene la isla, que desde hace años siente la sombra amenazante de una invasión china, de la que se habla aún más desde que Putin desencadenó la guerra de Ucrania. Es previsible que el régimen comunista que encabeza Xi Jinping encaje mal la victoria del partido que más apuesta por la eliminación de todo vínculo con China. Sobre todo cuando el propio dictador no hace aún quince días que aseguró que «la reunificación de nuestra madre patria es una inevitabilidad histórica».