Canarios: cambio volcánico
Mientras los científicos creen percibir los primeros signos de agotamiento en Cumbre Vieja, tras dos meses de una erupción que colocó a las Canarias en el centro de la atención mundial, es tan colosal el cúmulo variopinto de transformaciones experimentadas por la isla de La Palma que podría afirmarse que sólo el monumento a la virgen de Fátima resurgirá como antes, intacto, de los 70 mil terremotos y las cenizas del volcán.
A comenzar por la propia isla, que ha visto acrecentada su superficie en cuarenta hectáreas con el nuevo delta de lava en la playa de Los Guirres fusionado con la erupción del volcán San Juan, en 1949, donde las gaviotas y otras especies locales comenzaron ya a picotear el suelo aún caliente en procura de alimento.
Volcán La Palma. Foto E.Calero
Es cierto que la erupción arrasó también el chiringuito donde los veraneantes acostumbraban engullir sus tapas con cerveza y las viviendas de más de dos mil palmeros, pero en general la sacudida telúrica ha constituido un incentivo para los avispados canarios que sustituyeron el espanto y el estupor inicial por las más boyantes iniciativas.
“Hay –informa EL PAIS- especialistas en retirar la ceniza de los tejados o guías turísticos centrados en la montaña de fuego, mientras las tiendas de tecnología venden más prismáticos que nunca a personas preocupadas por sus casas”.
Para movilizar a los lugareños incomunicados por tierra, el ejército ha recurrido a las falúas que antaño se usaban para transportar a los agricultores a las fincas plataneras, esenciales para la economía local, en tanto que los guías que ya incluían los volcanes en sus rutas turísticas ahora no se dan abasto para atender la oleada de visitantes que del mundo entero acuden atraídos por el fenómeno, al precio de trasnochos porque las giras son nocturnas para captar mejor la magnificencia del espectáculo.
La jornada, en cambio, hace la fortuna de los sopladores de cable, gasolina o batería, alquilados por 25 euros diarios para despejar azoteas y plantaciones plataneras, mientras un equipo de 50 empleados municipales colaboran con varias empresas particulares para remover un promedio de 200 toneladas diarias de cenizas y el ejército y los bomberos han duplicado sus efectivos para atender la emergencia.
Nunca antes se vendieron en La Palma tantos binoculares, para los lugareños que escrutan angustiados el avance del magma sobre sus propiedades, ni tantos colchones para quienes han tenido que refugiarse en casas amigas, y ni hablar de los secadores en una isla de palmeras borrachas de sol donde la lluvia de ceniza arruina ahora la ropa.
Cuando la crisis haya amainado es probable que alguna actividad industrial despegue gracias al cristal de olivino, un material verduzco semiprecioso expulsado por Cumbre Vieja, útil en joyería e importante en geología y mineralogía, junto a otras rocas de valor, inclusiones magmáticas y fluidos, pero desde ya el Cabildo de la isla de Lanzarote vecina ha anunciado al alimón con la institución Vocento Gastronomía el primer Congreso Internacional de Cocinas y Ecosistemas Volcánicos.
Alrededor de 70 profesionales –cocineros, agricultores, vulcanólogos- y meros curiosos se reunirán del 1ro al 3 de diciembre en Worldcanic, para, según ABC, “singularizar los ecosistemas volcánicos como ejes de una vida natural, económica e identitaria”.
Es una experiencia que sin dudas favorecerá la etapa posterior al alboroto de Cumbre Vieja, como ocurrió cuando Lanzarote duplicó su población y estimuló la economía, y de ñapa incorporó al Nobel Saramago entre sus ciudadanos, después de la erupción del Timanfaya.
Entonces, los mayores expertos en el tema degustarán granos presuntamente excepcionales gracias a los efluvios de la montaña y platos preparados por chefs del lugar y llegados de entornos volcánicos del mundo entero; como Viviana Varesse, medalla Michelin siciliana que regenta un restaurant en las vecindades del Etna, Liko Hoe, que revolucionó la culinaria hawaiana con platos cocinados sobre piedras volcánicas o Paulo Costa, que prepara sus recetas de madrugada en el corazón de una caldera de las islas Azores.
La primera edición del Congreso podrá seguirse on line gracias a la plataforma digital www.worldcanic.com, resaltando la tremenda potencialidad de la isla y el resto de territorios volcánicos del mundo, para disipar cualquier duda sobre el temple de los voluntariosos canarios de poner al mal tiempo la mejor cara y extraer un futuro de prosperidad del volcán embrollador.
Varsovia, noviembre 2021