Derechos humanosDictaduraPolíticaRelaciones internacionales

Cancillería desbordada por pedidos de residencia

58a8bd3d95b9dHay casi 6.000 trámites pendientes y dan hora para 2018; se les entrega residencia a dos venezolanos por día.

El fuerte impulso migratorio de la región hace que en la Cancillería no tengan hora para tramitar la residencia a los nacionales del Mercosur. Desde octubre de 2014 a fines de 2016 se concedieron 15.935 residencias y se negaron 22; otras 1.207 fueron permanentemente canceladas y 5.919 se encuentran en proceso. Entre los que llegan al país llama la atención la gran cantidad de venezolanos: son más de dos por día los que obtienen el permiso para vivir en Uruguay.

La ley 18.250, y la modificación de la 19.254, concede a los nacionales de los países del Mercosur la posibilidad de acceder con rapidez a la residencia permanente, pero para realizar ese trámite hay que conseguir una cita en el Ministerio de Relaciones Exteriores, que al parecer está desbordado de trabajo.

El diputado nacionalista Jaime Trobo hizo sendos pedidos de informes al Ministerio de Relaciones Exteriores y al de Interior «para que se explique por qué razón no están concediendo audiencias para el inicio del trámite que autoriza la radicación permanente a los venezolanos que llegan».

También quiere saber «por qué razón, cuando se solicita información al teléfono 17707, se indica que hasta 2018 no hay citas y ni siquiera hay abierto un registro de solicitudes para esa fecha», señaló Trobo en declaraciones a El País.

«También preguntamos cómo aplica las consideraciones del comunicado de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos de fecha 25 de enero de 2017, que exhorta a los países de la región a tratar de forma especial a los venezolanos que deben abandonar su país por las graves circunstancias que viven», añadió el legislador.

Perfiles.

En cuanto a las residencias ya concedidas, el informe de la Cancillería al que accedió El País señala que el 42% corresponde a pedidos hechos por argentinos, el 18% a solicitudes de brasileños, el 13% a venezolanos, el 8% a peruanos y el 6% a colombianos.

En lo que respecta a las solicitudes pendientes, estas corresponden en un 31% a argentinos, el 24% a venezolanos, el 18% a brasileños y el 8% a peruanos.

La cantidad de residencias concedidas viene creciendo año a año. Se pasó de 613 en 2014 a 6.919 en 2015; 8.098 en 2016, y en enero de 2017 se entregaron 305.

Y se espera que esta tendencia continúe. «Se pronostica que, por la cantidad de reserva de turnos, el interés de los solicitantes por radicarse en Uruguay no disminuirá, sino que se entiende en progresivo ascenso», advierte el informe.

«Se deduce por el contacto diario que los solicitantes ven a Uruguay como un país seguro dentro de la región. (…) El sistema de salud, seguridad social y la relación laboral (Consejos de Salarios) son elementos significativos a la hora de elegir el país«, dice el informe de la Cancillería.

El 48% de los solicitantes tiene estudios terciarios o técnicos superiores. El 41% tiene calificación media o un oficio. El 78% estaba ocupado, el 6% son jubilados, el 10% son estudiantes y el 6% busca empleo. Por la formación que tienen, la Cancillería considera que «no se deberían afectar sensiblemente los recursos nacionales para formar e integrar a estos trabajadores».

En cuanto al rango etario de los solicitantes, el 50% tiene entre 25 y 44 años.

Volvieron.

Los datos del cierre del año pasado de la Oficina de Retorno y Bienvenida del Ministerio de Relaciones Exteriores, indican que entre enero de 2011 y diciembre de 2016 retornaron al país y se presentaron ante esa dependencia 12.859 uruguayos.

Los datos indican que el regreso de uruguayos se viene enlenteciendo de manera significativa. Totalizaron 2.792 en 2011; 3.358 en 2012; 2.164 al año siguiente; 2.307 en 2014; 1.019 en 2015 y 1.219 el año pasado.

Posiblemente esta evolución tenga que ver con el enlentecimiento en el crecimiento de la economía uruguaya que se expandió 5,2% en 2011, 3,5% en 2012, 4,6% en 2013, 3,2% en 2014 y solamente 1% en 2015. Aunque no están disponibles los datos del cierre de 2016, se calcula que el año pasado el producto se expandió algo más del 1%.

La oficina de la Cancillería aclara que los datos abarcan solo a los uruguayos que se presentaron ante esa dependencia y que, seguramente, muchos más volvieron.

En cuanto al país de origen de los retornados en 2016, los datos precisan que España continuó siendo el principal país de procedencia, con 313 casos. La profunda crisis económica que atravesó ese país (que en cierta medida ya se revirtió) explica lo ocurrido. A España le siguió Estados Unidos con 186 casos y Argentina con 183. De Venezuela volvieron 137 uruguayos.

Entre los retornados predominaron los hombres que son el 57% del total. En cuanto al rango etario de los retornados, la mayoría relativa correspondió a personas de entre 31 y 40 años.

El 66% de los que retornaron dijeron que en los países en los que estaban residiendo sus condiciones de vida eran «buenas», y el 14% señaló que eran «muy buenas».

El 33% mencionó que su regreso se debió a razones «identitarias» y por añoranza del país, en tanto que el 28% mencionó razones económicas y el 26% familiares.

La información por estado civil señala que el 41% de quienes regresaron son personas casadas, el 26% solteras, el 20% divorciadas, el 10% convivían en unión libre y el 3% eran viudos.

El 27% volvió con enseres y vehículos y el 22% solamente con enseres. El 5% lo hizo únicamente con vehículos. El 45% de quienes pasaron por la oficina había cursado Secundaria, el 25% tenía estudios universitarios y el 12% solo Primaria.

Los que más regresan parecen ser los que se fueron del país por motivos económicos; el 47% de quienes volvieron en 2016 se había ido entre 2001 y 2010. Buena parte de ellos sin duda lo hicieron como consecuencia de la crisis de 2002.

Repatriados.

La repatriación al país es realizada por el Estado, a través del Ministerio de Relaciones Exteriores, en el caso de que una persona o su familia tenga que retornar por razones debidamente justificadas de enfermedad, situación de vulnerabilidad social, violencia de género o doméstica, u otros motivos graves que impidan al individuo regresar por sus propios medios.

«En su mayoría, los compatriotas repatriados se encuentran en situaciones críticas y de alta vulnerabilidad en el país de residencia. En muchos casos se combinan situaciones de vulnerabilidad económica y de salud, y en otros de violencia doméstica y conflicto familiar. Son personas a las que se brinda una atención diferencial, un seguimiento y tratamiento desde que está en el país de procedencia», dice el informe de Cancillería.

La Oficina de Asistencia al Compatriota y Servicios de la Comunidad (OFAS) del Ministerio de Relaciones Exteriores procesó un total de 17 repatriaciones durante 2016.

Desde el año 2011 hasta 2016 se llegó a un total de 435 repatriaciones. El pico máximo se produjo en 2012, con 203 casos, de acuerdo a los datos oficiales.

«Se debe continuar con el proceso de facilitación en la reinserción de quienes arriban, sin generar obstáculos que puedan perjudicar y vulnerar los derechos ya consagrados», señala Cancillería.

El 31% de los retornados demanda por trabajo

La principal demanda de los uruguayos que retornan son los servicios de salud con el 36%.

El 31% demanda por trabajo. Se calcula que aproximadamente el 13% de quienes regresan probablemente lo hacen porque estaban indocumentados en el país en el que vivían. El 45% de los retornantes tiene nivel educativo secundario y un 25 % tiene estudios universitarios. El 12% tiene solo la escuela completa. «Como todo movimiento migratorio, el retorno trae aparejado la necesidad de la preparación y sensibilización de las instituciones estatales, las cuales deben repensar sus procedimientos y requisitos adaptándolos a quienes retornan», entiende la Cancillería.

Hay 70.000 uruguayos que residen en EE.UU.

En Estados Unidos reside aproximadamente el 13% de los uruguayos que viven en el extranjero. Se trata de la tercera colonia en importancia en el extranjero, de acuerdo con datos facilitados a El País por la Dirección General para Asuntos Consulares y Vinculación del Ministerio de Relaciones Exteriores.

Los uruguayos que residen en Estados Unidos son aproximadamente 70.000. Y en total son 529.620 los compatriotas que residen en otros países.

«Desde el punto de vista cuantitativo, Estados Unidos es el tercer país donde hay más compatriotas; siendo Argentina (212.800) y España (80.000), respectivamente, los que están en primera línea«, especifica la Cancillería.

Se identifican tres grandes «olas» de emigración de uruguayos hacia Estados Unidos. La primera tuvo lugar entre 1960 y 1975, y los emigrantes se radicaron fundamentalmente en Nueva Jersey y Nueva York. Otra oleada se produjo entre 1982 y 1984, y un tercer gran grupo partió entre 1999 y 2003, durante la crisis económica en Uruguay.

La Cancillería estima que los estados que tienen más población de uruguayos son Florida, Nueva Jersey (en particular la ciudad de Elizabeth), Nueva York, California, Texas, Georgia, Utah, Massachusetts, Carolina del Norte y Carolina del Sur.

Uruguay cuenta con cinco Consulados Generales en Estados Unidos (estos están ubicados en Washington, Nueva York, Chicago, Los Angeles y Miami) y 10 Consulados de Distrito, que se encuentran distribuidos en los lugares donde hay más uruguayos.

Desde 2013 el Ministerio de Relaciones Exteriores creó un sistema de Consulados Móviles que han servido para que las Oficinas Consulares puedan llegar hasta los lugares más lejanos.

«Esta población está conformada por uruguayos altamente calificados, con oficios especializados y con una gran experiencia en brindar servicios«, señala la Cancillería.

En 2016 fueron 186 los uruguayos que volvieron desde Estados Unidos, siendo el segundo país con más retornados, después de España, con 313.

Mira también
Cerrar
Botón volver arriba