Cayetana Álvarez de Toledo pide a Borrell no convertirse en un «agente» de Maduro
La exportavoz del Partido Popular (PP) en el Congreso Cayetana Álvarez de Toledo pidió este miércoles al Alto Representante de la UE para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, rechazar las elecciones legislativas convocadas en Venezuela para diciembre y no convertirse así en un «agente» del presidente Nicolás Maduro.
«Quiero decirle al señor Borrell, no se convierta usted en un nuevo (expresidente español José Luis Rodríguez) Zapatero, es decir, en un agente de la tiranía de Maduro, absténgase de apoyar las elecciones fraudulentas en Venezuela», dijo la diputada durante un foro virtual que han denominado «Ibero Cumbre».
A su juicio, el llamado a las urnas en el país caribeño, que ha sido rechazado por la mayoría de los partidos opositores, «solo busca socavar la legítima Asamblea Nacional (AN, Parlamento) y prolongar la vida de un régimen criminal», en alusión a la llamada revolución bolivariana.
Por ello, la legisladora derechista decidió «lanzar una grave y solemne advertencia» a Borrell, especialmente luego de que el Gobierno de Maduro pidiese a la Unión Europea (UE) participar en los comicios como observadores internacionales y con amplias facultades.
«No manche el prestigio, por favor, de Europa como baluarte de la democracia y de los derechos humanos (…) no convierta a la Unión Europea en coartada de la dictadura», dijo sin dejar de pedir a Borrell que presione «para que haya elecciones presidenciales limpias, con ley y libertad» en Venezuela.
Álvarez de Toledo también se manifestó en contra del llamado a participar en estas legislativas hecho por el dos veces candidato a la Presidencia Henrique Capriles, que se ha desmarcado de la ruta abstencionista marcada por Juan Guaidó, a quien unos 50 países reconocen como presidente interino de Venezuela.
«Rechazo rotundamente la operación encabezada por Henrique Capriles, que mucho más que una traición a Juan Guaidó es una traición a la esperanza de una Venezuela democrática», sostuvo la diputada del PP, actualmente enfrentada con la dirigencia de su formación política que la cesó como portavoz del grupo en el Congreso.
La diputada, a la que su partido relegó a su escaño, sin otorgarle voz ni presidencia en las comisiones parlamentarias, consideró que el plan de Capriles «es una operación inmoral e inútil».
«Inmoral porque socava la unidad de los demócratas (…) inútil porque solo sirve para dar oxígeno a la dictadura, para blanquear la represión, el crimen y el saqueo», prosiguió.
Además, la exportavoz de los «populares» solicitó a la Administración española, dirigida por Pedro Sánchez, que reitere su respaldo a Guaidó.
«Quiero pedirle hoy al Gobierno de España que ratifique el apoyo público al presidente Guaidó, porque ese apoyo público es al conjunto del pueblo venezolano al que (él) legítimamente representa», dijo durante el conversatorio, en el que también participó Guaidó.