Cecilia Todd, algo no cuadra
Esta fotografía fue hecha por Tito Caula muy probablemente a finales del año 1972, quizá como reclamo publicitario para el primer concierto de Cecilia Todd, que tuvo lugar el 9 de noviembre de 1972, en la USB (Universidad Simón Bolívar)
“La leyenda venezolana”, como la aludió el diario Clarín, de Argentina, nació el 4 de marzo de 1951. Este año cumplió 70. De manera que en el momento en que fue fotografiada por Tito Caula, ella está a unos tres de meses de cumplir los 22. Es la edad que tenía cuando llegó a Buenos Aires, el 20 de junio de 1973 para estudiar técnica vocal con la maestra Susana Naidich. En la capital porteña permanecería tres años, en los que dio recitales que le ganaron gran popularidad. No iba sola en su viaje al cono sur, llevaba su cuatro y su primer disco “La embarazada del viento”, que había grabado con el sello BASF de Venezuela…
Un momento. El 15 de marzo de 2020, Cecilia Todd dijo, en el programa La Voz de Chávez, transmitido por VTV (Venezolana de Televisión) que «la Revolución Cultural que inició el Comandante Hugo Chávez», no solo había transformado el ámbito editorial hasta el punto de que en la primera feria del libro organizada por el chavismo, «la gente usaba carritos de supermercado para adquirir obras que antes eran muy costosas»; sino que antes de Chávez el país había estado «signado por la trasculturalización [sic] mundial, proveniente sobre todo de EE.UU., que logró mediante cine, televisión, literatura, tecnología, comiquitas y hasta juguetes deformar la cultura venezolana». Si es así, cómo es que en ese mismo país hubieran invitado a una desconocida a participar en un concierto en una universidad, que entonces tenía miles de estudiantes y ningún profesor había tenido que emigrar para ganar más de un dólar al mes, con lo que la audiencia era muy numerosa. Y si todos esos medios que ella menciona eran tan deformantes y nefastos, cómo es que ella aceptó presentarse, en 1970, en El show de Renny. Pero, además, si todos esos medios solo proponían mensajes “provenientes sobre todo de los Estados Unidos”, cómo es que Renny Ottolina la invitó a su programa y cómo es que una disquera apostó por una chiquilla que estaba empezando su carrera.
Escenarios
¿No habrá un error? El conocido músico Miguel Delgado Estévez conoció a Cecilia Todd cuando ella regresó de Argentina en 1976. «Muy pronto compartimos escenario, repertorio, grandes momentos», recuerda Delgado Estévez. «En el grupo que la acompañaba en sus presentaciones estábamos Cristóbal Soto, en la mandolina, y yo, en la guitarra. Ella se acompañaba con el cuatro. Fueron momentos muy gratos, de mucha cosa compartida».
Ya va. Cómo que compartieron escenario. En diciembre de 2017, en una entrevista también en Argentina, Cecilia Todd afirmó que, antes de Chávez, en Venezuela, «La gente no sabía que tenía derecho a acceder a un teatro. Había gente que jamás había ido a un teatro, nunca. En el teatro Teresa Carreño, el más grande de Caracas, era imposible sacar las entradas. Eran muy caras, no estaban al alcance de la mayoría. Pues se han recuperado en Caracas doce teatros, que ahora están en funcionamiento. De repente la gente empezó a ver que podía ir al teatro». ¿Significa esto que, antes de Chávez, Cecilia Todd jamás se presentó en un teatro en Caracas? Y si es así, entonces, ¿cantó solo para los ricos que podían pagar las entradas?
Discos
— Cecilia Todd tiene un puesto en la historia de la música popular en Venezuela como intérprete -dice Miguel Delgado Estévez-. Y eso nadie lo ha puesto en duda. Yo le hice los arreglos de dos de sus discos. En el primero, de 1980, no aparecen mis créditos porque yo tenía un contrato de exclusividad con Promus, y Cecilia había firmado con otra disquera. Pero entonces Cecilia firmó con Promus y entonces sí aparecen mis créditos en los arreglos, la dirección y la producción; es el famoso “El novio pollero”, de 1982, de música cañonera, un exitazo que ella tuvo pegado por meses en las emisoras de todo el país».
Ya va. ¿”El novio pollero” sonó en la radio venezolana? ¿Por meses? Pero si Cecilia Todd aseguró, en entrevista del 17 de septiembre de 2017, que: «nosotros» (se refiere al chavismo, «hicimos una ley para defender la música venezolana» porque antes de Chávez el 90 % de la música venía de las grandes disqueras internacionales, que le pagan a las emisoras y que estas «buscaron la manera de neutralizar la música venezolana, por ejemplo no terminaba la canción. Ponían una cuarta parte o la mitad de la canción e iban a comerciales».
Admirable afinación
Si damos credibilidad a las declaraciones de Cecilia Todd en el extranjero, su país se las arregló para conocer su trabajo por vías distintas a la radio, la televisión y los teatros; y el caso es que ya en los años 70 el país adoró su voz, así como su estilo de interpretación y su repertorio. ¿Cómo sería que la conocimos? Los multimillonarios la vimos en escena, eso seguro, las manos rojas de aplaudir, y constatábamos que Cecilia no tenía el vozarrón de Soledad Bravo, pero sí una dulzura sinigual y una afinación prodigiosa.
—Cuando conocí a Cecilia Todd -recuerda Miguel Delgado Estévez- una de sus grandes características era su extraordinaria afinación. En la historia reciente no puedo decir porque no he escuchado más trabajos de ella. Sé que canta en eventos del régimen y que con frecuencia sale, o salía, de gira con el auspicio de varias instituciones del Estado… ya sabemos cuáles son los países del exterior adonde va Cecilia como vocera de Nicolás Maduro. En cuanto a su repertorio, Cecilia no canta pendejadas. Ella ha hecho un repertorio de mucha calidad. Una de sus grandes fortalezas es hacer música popular venezolana de la mejor factura. Y ha tenido muy buen tino en la selección de los compositores y de las piezas.
Promus, Sonográfica, va pues
Todo es muy raro. En esa misma entrevista de 2017, Cecilia Todd aseguró que a las audiencias venezolanas no le dan su música. Que las cosas habían cambiado cuando el chavismo, a través del Ministerio de Cultura, hizo el Cendis, (Centro Nacional del Disco) «que tiene un estudio de grabación. Ahí puedes grabar tu disco gratis. Se graba todo tipo de música, desde lo tradicional de la música venezolana hasta música de cámara, coros, rock… Te dan tu cd y además se pueden replicar discos».
Pero cuando se analiza la discografía de la intérprete de “Pajarillo verde” se encuentra uno conque de sus trece discos, nueve fueron hechos antes del «comandante Chávez», incluido el hit “A tu regreso”, una producción de Sonográfica, en 1988; el décimo, ya en 2000, el magnífico “Canciones de Henry Martínez”, lo hizo Fundación Bigott, que no tiene nada que ver con la revolución; el once lo hizo en Argentina, con Acqua Récords (no con el Poncho Harapiento o algo así); de manera que solo el 12 y el 13 fueron grabados en “producción independiente”, en 2008 y 2015. Y luego, nada, alguna grabación de refritos.
Familias ricas
No terminan aquí las curiosidades. Cecilia Todd ofreció no pocas declaraciones a la prensa sobre las protestas de 2017, en Venezuela. Según ella, los jóvenes que salieron a manifestar contra Nicolás Maduro «son mercenarios a los que les pagan con dinero, con droga, con equipos».
Afirmó que lo que ocurrió en esos meses fue que esos mercenarios, “pagados con dinero y droga” habían salido a perseguir a la gente humilde y a quienes apoyaban a Maduro. «Hemos visto cómo incendiaron a un chico porque es moreno», dijo Cecilia Todd. «Ser moreno quiere decir ser chavista. “Ese parece chavista’’ es la voz que se oye. Y van, lo acuchillan, le tiran gasolina y lo prenden. […] No podemos salir de nuestras casas, nos tienen marcados. Yo no puedo salir sola, para comprar comida tengo que salir acompañada. Han tratado de cacerolearme, me dicen de todo. ‘’Vamos a matar a todos los chavistas’’, ‘’te voy a denunciar por estar apoyando a este gobierno’’, ‘’sé dónde vives’’, etc. […] Hay una prepotencia que es de clase. Son de familias muy ricas de siempre, están acostumbrados a hacer lo que se les da la gana».
—Las manifestaciones violentas de la oposición, -dijo también- que han sido muy violentas y se ha querido ver al revés. Es una locura: incendian gente, incendian gente. Queman gente viva. Han quemado gente viva en manifestaciones supuestamente pacíficas. Y la Guardia Nacional desde Chávez no está armada. Lleva gases lacrimógenos, pero no armas de fuego.
No, no, pero cómo: «la Guardia Nacional desde Chávez no está armada». Pues sí. Eso lo dijo Cecilia Todd, la sublime intérprete de “El caminante”.
No son estudiantes, son terroristas
En 2019, Cecilia Todd estuvo en Barcelona, España, en una de esas giras sin disco nuevo. En un “conversatorio musical”, organizado por la Asamblea Bolivariana de Cataluña, dijo que quienes protestan en Venezuela «ni siquiera son estudiantes, sino terroristas entrenados y financiados para generar el caos en el país y culpar por ello al presidente constitucional, Nicolás Maduro». Y aseguro haber visto «cómo quemaron clínicas, hospitales, guarderías… también quemaron vivas a 26 personas… nueve de ellas murieron».
A nadie puede extrañar. En 2015, unos meses después de que las calles de las principales ciudades de Venezuela se cubrieran de sangre de venezolanos que habían salido a protestar en 2014, Cecilia Todd prestó su voz, su hermosa y querida voz, para buscar firmas en apoyo a Maduro y para solicitarle al entonces presidente Barack Obama que retirara el decreto donde calificaba a Venezuela de “amenaza inusual y extraordinaria”.
En julio de 2019, la alta comisionada de la Oficina de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, presentó un informe sobre Venezuela donde documentaba la sistemática violación de los derechos humanos perpetrados por Maduro (de quien Cecilia Todd dijo que es “músico”) y estableció que: «Miles de personas, principalmente hombres jóvenes, han sido asesinados en supuestos enfrentamientos con fuerzas estatales en los últimos años. Existen motivos razonables para creer que muchas de esas muertes constituyen ejecuciones extrajudiciales perpetradas por las fuerzas de seguridad». Algo no cuadra.