Colombia prohibirá la entrada a Maduro como primeras sanciones al Gobierno de Venezuela
El Grupo de Lima emitió el viernes una declaración en la que pide al mandatario que no tome posesión para un segundo mandato
El ministro de Exteriores de Colombia, Carlos Holmes Trujillo, ha anunciado este martes que el Gobierno prohibirá la entrada al país del presidente venezolano, Nicolás Maduro, y otros altos cargos de su Ejecutivo, en las primeras sanciones adoptadas por Bogotá contra Caracas.
Holmes Trujillo ha dado una rueda de prensa para dar a conocer las medidas que adoptará Colombia, en línea con la ofensiva diplomática anticipada por el Grupo de Lima, al que pertenece, si Maduro insiste en tomar posesión el 10 de enero para un segundo mandato, según informa la prensa colombiana.
Así, ha revelado que una de las primeras medidas será «impedir a los altos funcionarios del régimen venezolano la entrada al territorio de los países integrantes del Grupo de Lima -del cual hace parte Colombia- y elaborar listas de personas naturales y jurídicas cuyas entidades bancarias deberán prevenir el acceso al sistema financiero».
Holmes Trujillo ha subrayado que «todas las acciones son de carácter político y diplomático». «El presidente Duque es un demócrata (…) Todos sus actuaciones tienen el propósito, dentro de la legalidad internacional y hemisférica y sin ánimo belicista, de construir consensos con otras naciones para que Venezuela pueda vivir en democracia», ha dicho.
El canciller peruano, Néstor Popolizio, ya avanzó el lunes que su Gobierno prohibirá la entrada a Perú a Maduro y al resto de la cúpula venezolana, incluidos los familiares, y actuará también contra «las entidades que tienen la posibilidad de controlar todo el manejo o las transferencias bancarias de este grupo».
El Grupo de Lima emitió el viernes una declaración en la que pide a Maduro que no tome posesión para un segundo mandato y transfiera de «forma provisional» el Poder Ejecutivo a la Asamblea Nacional, controlada por la oposición desde las elecciones parlamentarias de 2015, «hasta que se realicen nuevas elecciones presidenciales democráticas».
Los firmantes, al igual que la oposición y gran parte de la comunidad internacional, no reconocen las elecciones presidenciales del 20 de mayo porque creen que no cumplieron los estándares democráticos, por lo que tampoco reconocerán a Maduro como presidente venezolano a partir del 10 de enero, cuando expira su primer mandato y empezaría el segundo.
Si Maduro sigue adelante con la investidura presidencial, han avanzado que revisarán «el estado o nivel de sus relaciones diplomáticas con Venezuela, en función del restablecimiento de la democracia y el orden constitucional en ese país y de la necesidad de proteger a sus nacionales e intereses».