Cuba sigue “reprimiendo el disenso y la crítica”, denuncia HRW
Según la organización de DD HH, solo la presión internacional puede frenar los abusos en Venezuela
(con información de EFE). -La única esperanza que le queda a Venezuela para salir de su crisis es la presión internacional, especialmente de sus vecinos, a juicio de la organización Human Rights Watch (HRW), que llamó este jueves a estar «vigilantes» en los procesos electorales de este año en países latinoamericanos. Entre los países que más presión pueden ejercer sobre Caracas la ONG no cita a Cuba, que tampoco sale bien parada del balance anual como viene siendo habitual.
En su informe sobre la situación de los derechos humanos en el mundo, la ONG califica al régimen de Nicolás Maduro de «autocracia incompetente» y lo acusa de haber «destruido la economía de un país potencialmente rico en petróleo».
En un diagnóstico devastador, HRW considera que no queda en el país ninguna institución independiente que pueda actuar como contrapoder, más aún después de que el Gobierno haya «llenado los tribunales de jueces que ni siquiera fingen independencia».
La ONG califica al régimen de Nicolás Maduro de «autocracia incompetente» y lo acusa de haber «destruido la economía de un país potencialmente rico en petróleo»
«En este panorama tan crítico, no hay instancias internas para frenar abusos o castigar a los responsables. ¿Qué es lo único que queda? Las instancias internacionales. Son la única posibilidad, la condena internacional constante», dijo en declaraciones telefónicas a Efe el director para América de HRW, José Miguel Vivanco.
La organización subrayó especialmente el giro adoptado por los gobiernos de once democracias latinoamericanas, cuya reacción ha sido «sobresaliente», a juicio de Vivanco.
Las voces que se alzaron en los países vecinos para sumarse a los manifestantes dentro de la propia Venezuela supusieron un hecho casi sin precedentes, ya que tradicionalmente han sido reticentes a criticar la represión, señala el informe.
Vivanco ve en la aplicación de sanciones individuales contra responsables venezolanos la forma más efectiva de presionar al régimen de Caracas, como se dispone a hacer la Unión Europea congelando activos y prohibiendo entrar en territorio comunitario a ciertos altos cargos.
Además, llamó a los países latinoamericanos a pedir que la Fiscalía de la Corte Penal Internacional (CPI) abra una investigación por la violación de derechos fundamentales en ese país.
Este mismo miércoles, Vivanco denunció a través de su cuenta de twitter la operación militar que concluyó con la muerte de varias personas, entre ellas el expolicía rebelde Oscar Pérez, y la comparó con las desapariciones forzosas de las dictaduras chilena y argentina.
No ha habido sorpresas para el informe sobre Cuba de 2018. HRW sostiene que el Gobierno «continúa reprimiendo y castigando el disenso y la crítica pública» y que, a pesar del descenso en las detenciones arbitrarias, las autoridades siguen «usando otras tácticas represivas, tales como golpizas, denigración pública, restricciones de viaje y despidos».
El número de arrestos breves bajó en un 50% respecto a 2016 según los datos de la ONG, suministrados por la Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional, pero el informe explica cómo las detenciones se hacen habitualmente sin orden judicial y la liberación se produce tras una advertencia que, posteriormente, se utiliza en un proceso judicial para alegar un «patrón de conducta delictiva». Los arrestos son «preventivos», según HRW, para evitar que el detenido participe en alguna actividad que desagrade a las autoridades.
Cuba suspende, como es habitual, en derechos laborales, carcelarios, de asociación y libertad de expresión. En el caso de los primeros la organización lamenta que la Isla siga violando convenios de la Organización Internacional del Trabajo que ha ratificado, «especialmente en materia de libertad de asociación, negociación colectiva, protección salarial y prohibición del trabajo forzado».
«El gobierno cubano todavía se niega a reconocer la defensa de los derechos humanos como una actividad legítima, y niega estatus legal a organizaciones locales de derechos humanos», añade el informe, que cita expresamente a Cubalex, cuyos miembros se vieron obligados a abandonar el país y han recibido estatus de refugiados en EE UU.
Las cárceles están sobrepobladas y los presos están obligados a trabajar jornadas de 12 horas entre otros abusos ante los que están indefensos, pues no existen mecanismos efectivos para reclamar
Las cárceles están sobrepobladas y los presos están obligados a trabajar jornadas de 12 horas entre otros abusos ante los que están indefensos, pues no existen mecanismos efectivos para reclamar. Además, el Gobierno se sigue negando a que las ONG especializadas visiten los centros penitenciarios. En ellos permanecen también decenas de presos políticos -incluidos 54 miembros del grupo Unión Patriótica de Cuba (Unpacu)- cuyos casos no se pueden documentar. El informe cita concretamente los casos de Eduardo Cardet, del Movimiento Cristiano de Liberación, y Jorge Cervantes García, que fue liberado en agosto tras 85 días retenido durante los que llevó a cabo una huelga de hambre de 39.
Human Right Watchs también denuncia la imposibilidad de viajar que sufren millones de cubanos, puesto que no solo lamenta los casos de críticos a quienes se ha obstaculizado salir al extranjero para participar en conferencias, sino el férreo control que ejerce el Gobierno en movilidad interior para dificultar la migración a La Habana.
En el apartado dedicado a los medios de comunicación, HRW recuerda que Cuba impide y bloquea el acceso a varias páginas web de prensa crítica (como es el caso de este diario) y retiene, hostiga y amenaza a reporteros independientes como Henry Constantin o Sol García Basulto.
Para la organización, EE UU, la Organización de Estados Americanos (OEA) y la Unión Europea (UE) son algunos de los actores internacionales determinantes en el caso de Cuba, ya sea por las tensiones -con la llegada de Donald Trump a la presidencia o la hostilidad abierta hacia el secretario de la OEA, Luis Almagro- o la mejora de sus relaciones en el caso de los Veintiocho de la UE. Human Rights Watch resalta que en octubre de 2016 Cuba fue reelegida para integrar el Consejo de Derechos Humanos durante el período 2017-2019.
El país con «mayor riesgo de victoria populista» es México, donde Andrés Manuel López Obrador lidera las encuestas. «Y Trump es su mejor amigo»
En cuanto a la región, la organización instó a estar «vigilantes» en las elecciones que se celebrarán en 2018 en diferentes países latinoamericanos, después de que los expertos de la OEA constataran grandes irregularidades en los comicios del pasado año en Honduras.
Para el director ejecutivo de HRW, Kenneth Roth, el país con «mayor riesgo de victoria populista» es México, donde Andrés Manuel López Obrador lidera las encuestas. «Y Trump es su mejor amigo, políticamente hablando, porque cuanto más se mete con México y los mexicanos, más apropiada parece ese tipo de respuesta», subrayó Roth.
La organización considera «muy precarias» las condiciones democráticas existentes en México, y recuerda en su informe el «escaso progreso» que el Gobierno de Enrique Peña Nieto ha hecho en perseguir a las fuerzas de seguridad responsables de graves abusos como torturas y ejecuciones extrajudiciales.
Respecto a Colombia, el informe aplaude el acuerdo de paz con las FARC alcanzado en 2016, pero se muestra crítico con la parte referida a la justicia, ya que «se arriesga a dejar impunes a criminales de guerra».
El informe aplaude el acuerdo de paz con las FARC alcanzado en 2016, pero se muestra crítico con la parte referida a la justicia, ya que «se arriesga a dejar impunes a criminales de guerra»
«Valoramos el esfuerzo de (el presidente, Juan Manuel) Santos, pero no podemos ocultar nuestras objeciones respecto de la debilidad del acuerdo de justicia, que promueve más la impunidad que la justicia o el castigo a aquellos que han cometido graves violaciones«, apuntó Vivanco.
El hecho de que el tribunal no pueda imponer penas de privación de libertad para los autores de esos crímenes, sino sólo restricciones a la libertad ambulatoria para realizar tareas de servicio a la comunidad, «es algo que no tiene precedentes en ningún país del mundo«, subrayó.
HRW también recuerda las «espantosas condiciones de vida» que sufren los indígenas Wayuu en la provincia de la Guajira, que «no son dignas de un Estado que aspira a incorporarse a la OCDE(Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos)».
En su repaso a los países de la región, la ONG califica de «muy desafortunado» el indulto concedido por el presidente peruano, Pedro Pablo Kuczynski, a su predecesor Alberto Fujimori, y lo considera un «pésimo referente» para el resto de sus vecinos.