El Congreso de Perú admite la moción de censura contra el presidente Martín Vizcarra

El pleno del Congreso de Perú admitió el pasado viernes a trámite la moción de censura presentada contra el presidente de la nación andina, Martín Vizcarra, por presunta corrupción y ha fijado el debate para el próximo viernes.

La cámara baja peruana presentó la moción el jueves, tras la difusión de unos audios que presuntamente vincularían al mandatario con el caso del cantante Richard Swing, investigado por su contratación irregular en el Ministerio de Cultura.

La moción, que oficialmente se ha presentado por incapacidad moral, se ha admitido con 65 votos a favor, 36 en contra y 24 abstenciones, según ha trasladado la cuenta de Twitter del Congreso peruano. Vizcarra podrá presentarse ante el pleno el viernes para ofrecer su defensa o puede enviar a un abogado para que lo haga en su lugar. Para que la moción salga adelante y el presidente sea apartado del cargo se necesitan 87 votos.

Ni el más desternillado guion de una plataforma de series televisivas pudo haberlo descrito mejor: el presidente de Perú, Martin Vizcarra frente a una moción de censura debido a la difusión de unos audios grabados en Palacio de gobierno por su exsecretaria, Karem Roca; con el fin de que no se conozcan todas las visitas que le realizó a Vizcarra un artista rocambolesco y que trabajo como consultor llamado Richard Cisneros y que es más conocido como «Richard Swing».

Conferencias de autoayuda

La petición de moción de censura fue realizada por el congresista Edwin Alarcón, quien presentó los audios en el Congreso señalando que el presidente Vizcarra había cometido varios delitos, entre ellos, falsedad, obstrucción a la justicia y debido a ello, debe ser retirado de inmediato del cargo para que asuma el actual presidente del Congreso, Manuel Merino.

La moción contra Vizcarra se basa en varios reportajes del programa de espectáculos, «Magaly la firme», donde se denunció que Richard Swing trabajaba en el Ministerio de Cultura por su amistad con Vizcarra; donde brinda conferencias de autoayuda, compone canciones y organiza festivales musicales.

La exsecretaria de Vizcarra lo grabó en una reunión en Palacio de Gobierno cuando se discutía el caso de Richard Swing, revelado como un consultor del ministerio de cultura que recibió 175 mil soles (cerca de 50 mil euros) en seis gestiones seguidas sin tener supuestamente ninguna capacidad profesional para ello, salvo ser un cantante y un compositor.

«No voy a renunciar»

«Ayer han presentado tres audios, pero hay más, que se escuchen todos, que se vea cómo han urdido una trama para desestabilizar al gobierno, las instituciones y la democracia», dijo Vizcarra, al tiempo que añadió, «hay ciertos personajes que no pierden la costumbre de grabar conversaciones ilegalmente, y hoy lo han vuelto a hacer a través de personas que eran de su confianza».

«No voy a renunciar, tengo un compromiso con el Perú y lo voy a cumplir hasta el último día de mi mandato», concluyó el mandatario de uno de los países más afectados en el mundo de fallecidos por la pandemia de Covid-19.

Desde el año 2000, en que se difundió un vídeo que mostraba a Vladimiro Montesinos, el exbrazo derecho del presidente Alberto Fujimori, hoy preso por corrupción, o comprando congresistas a cambio de dinero, la política peruana ha estado marcada por grabaciones secretas que han traído abajo gobiernos enteros y una suerte de desconfianza generalizada en que cualquier persona del entorno de un político puede grabar o fotografiarte con el fin de obtener algo a cambio, no necesariamente dinero sino un puesto o acabar con un enemigo político.

De hecho, en marzo del 2018, el expresidente Pedro Pablo Kuczynski se vio obligado a renunciar al cargo luego que se difundieran unos audios y vídeos grabados por el ex congresista Moises Mamani (fallecido por covid 19) donde lo denunció por ofrecer favores a Kenji Gerardo Fujimori (hijo menor del expresidente Fujimori) a cambio de que no votasen a favor del pedido de vacancia contra él, por sus lazos con la empresa Odebrecht.

El principal denunciante de Vizcarra, Edgar Alarcón, grabó en 2017 al ahora presidente Vizcarra cuando era ministro de Transportes con el fin de denunciar un manejo corrupto en la obra que busca hasta hoy sin éxito construir un aeropuerto en Chinchero en Cuzco.

El excontralor Alarcón está siendo investigado por la fiscal de la Nación, Zoraida Ávalos, quien en julio pasado presentó dos denuncias constitucionales por haber encontrado elementos suficientes que hacen presumir que cometió los delitos de enriquecimiento ilícito agravado y peculado doloso, cuando se desempeñó como extitular de la Contraloría General de la República (2016-2017).