El referendo sobre la disputa territorial con Guyana termina siendo un plebiscito contra Maduro

Los expertos electorales aseguran que en Venezuela puede haber ocurrido la mayor abstención desde 1958, cuando se restableció el voto en el país. Según cifras oficiales, alrededor de un 10% del padrón electoral votó este domingo en un referendo sobre una histórica disputa territorial con Guyana; sin embargo observadores independientes estiman una cifra menor de participación.

Sin dar detalles sobre participación total, ni información detallada por estados (provincias), como es habitual en Venezuela, el Consejo Nacional Electoral presentó la noche de este domingo tres cifras de 10,5 millones de «votos» sin referirse explícitamente al número total de votantes. Más de 12 horas estuvo activa la consulta en todo el país, con una muy escuálida presencia de votantes según reportaron diversos medios de prensa independientes.

Haciendo inferencia sobre esta cifra oficial y el hecho de que los votos se dividieron en partes iguales entre cinco preguntas del referendo, el periodista Eugenio Martínez, especializado en temas electorales, apunta que la participación estuvo en torno a 2,1 millones de personas. Esto representa un 10% del padrón electoral, que el propio CNE infló ya que no ha se ha depurado un aspecto como el impacto de que casi ocho millones de personas hayan salido del país desde 2015.

«El chavismo se ha dado un tiro en el pie. Se ha negado a depurar el registro electoral con lo cual el padrón está sobreestimado. No logró activar su maquinaria electoral, ni le valieron las coacciones, y lo que es peor, aunque se maquillen las cifras, termina siendo paradójico que en el simulacro previo participaran más venezolanos que en la consulta de este 3 de diciembre, esto según las propias y contradictorias cifras del chavismo«, apuntó un veterano diplomático sudamericano a DIARIO DE CUBA.

De acuerdo con una red de periodistas católicos, activados este domingo en una docena de estados (provincias) de Venezuela, la votación estuvo por debajo del 10% en un conjunto de centros de votación auditados de forma independiente e informal. Las autoridades no permitieron veeduría electoral formalmente, ni presencia de observadores nacionales o internacionales.

Para esta red de comunicación católica, cuyos integrantes confirmaron sus hallazgos a DIARIO DE CUBA a condición de que no se difundiera su identidad, por temor a represalias, lo más llamativo no solo fue la bajísima participación electoral general, sino la ausencia de votantes en lugares que tradicionalmente fueron focos del activismo chavista. «Allí también reinó la desolación», precisan.

Según cifras históricas de Venezuela, puestas en el tapete por analistas, aun con la cifra oficial que daría un 90% de abstención, que podría ser mayor según la observación independiente, el país ha registrado el mayor ausentismo electoral desde que el voto retornó a la vida institucional en 1958.

El referendo resultó controvertido desde su lanzamiento. Fue, en verdad una suerte de respuesta del chavismo ante la arrolladora presencia de la opositora María Corina Machado, quien resultó electa el 22 de octubre como candidata unitaria con 2,3 millones de votos en una consulta interna y autogestionada. Se suponía o que ayudaría a testear la maquinaria electoral del chavismo o que ayudaría a unificar a a la base de apoyo de Nicolás Maduro, quien en 2024 buscará la relección.

A juicio del politólogo Piero Trepiccione, subdirector de la Fundación Centro Gumilla, los resultados del referendo deben entenderse como un plebiscito sobre la candidatura de Maduro y deberían generar revisiones y reacomodos internos dentro del oficialista Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV).

«El PSUV debe considerar seriamente lanzar otro candidato presidencial para 2024. La falta de sintonía de Maduro con el pueblo es cada vez más evidente», comentó Trepiccione al ser consultado por DIARIO DE CUBA.

En un reciente foro de análisis organizado por Medianálisis, la periodista política Luz Mely Reyes apuntó el nombre de la vicepresidenta Delcy Rodríguez como una posible candidatura alternativa a Maduro. Sin embargo, dentro del chavismo no se ha colocado este tema en discusión.

En torno a las primarias de la oposición, que significaron la consolidación de Machado con amplio respaldo popular, el encuestador Félix Seijas ratificó que según los datos históricos que ha recabado, se registra el punto más bajo para el chavismo, incluso por debajo de momentos álgidos como los que se vivieron durante las duras represiones de 2014 y 2017.

Por otro lado, el referendo de este domingo no tiene implicaciones prácticas en la histórica disputa de Venezuela y Guyana, por un territorio denominado Esequibo que los venezolanos reclaman como propio desde el siglo XIX.

Tras prolongadas e infructíferas negociaciones, mediadas por la ONU, Guyana dio por concluido este mecanismo y acudió a la Corte Internacional de Justicia. Aunque Venezuela ha intentado desconocer la competencia de la Corte, incluso entre las preguntas del referendo se desliza este tema, en general la comunidad internacional aprueba que sea en esa instancia donde se resuelva la disputa.

La disputa entre Caracas y Georgetown, por otro lado, es un asunto delicado para la diplomacia e intereses de Cuba. Aunque el régimen castrista ha dependido largamente del suministro de petróleo en condiciones ventajosas facilitado por el chavismo, en esta disputa históricamente ha apoyado a Guyana.

Finalmente, para Guyana que ejerce presencia en la zona en disputa, el Esequibo significa dos tercios de su ya pequeño territorio: 214.000 kilómetros cuadrados. La controversia ha adquirido interés geopolítico dado los importantes hallazgos petrolíferos.