Foro: Propuestas y reconocimiento para superar la crisis
Para conocer la visión de los especialistas para el nuevo año, el Instituto de Estudios Parlamentarios Fermín Toro y la Universidad Católica Andrés Bello (UCAB) realizaron el 28 de enero el foro “Perspectivas Institucionales 2016” que contó con las ponencias de Simón Calzadilla, segundo vicepresidente de la Asamblea Nacional; Genny Zúñiga, investigadora del Instituto de Investigaciones Económicas y Sociales de la UCAB y Orlando Ochoa, economista y coordinador de Pensar en Venezuela. El foro fue moderado por el abogado y político, Ramón José Medina.
En su discurso de apertura, Ramón Guillermo Aveledo, presidente del Instituto de Estudios Parlamentarios Fermín Toro aseguró que: “Hay angustia pero también esperanza ante el cambio, con las dificultades que eso implica”.
Aveledo agregó que el Gobierno ha tenido que aprender a compartir el poder en términos constitucionales. “Es ahora que estamos viendo la virtualidad de la constitución”, dijo.
Aprovechó la oportunidad para destacar la labor que el Instituto realiza para brindarle apoyo en su formación a los parlamentarios.
El contexto económico y social del país
Para presentar sus “Perspectivas Económicas”, Orlando Ochoa expuso sobre la relación entre el petróleo y la macroeconomía en la crisis venezolana en el 2016. Indicó que el país atraviesa una seria caída de divisas y cree que si hubiese un plan de recuperación para el sector privado, tomaría aproximadamente un año en reactivarse. Mientras que el sector público ameritaría más tiempo.
Advirtió que al ritmo de la inflación PDVSA no podrá cubrir los gastos de su propia nómina, pues realiza transacciones con el dólar en 6,30. “El petróleo es el único motor que realmente mantiene la economía venezolana”. Recalcó la necesidad de crear condiciones para la expansión de la producción petrolera. “Quien vaya a financiar a Venezuela verá el flujo de caja por petróleo (…) para producir petróleo hace falta ordenar la macroeconomía”, dijo.
Ochoa presentó un Plan de Rescate que tomaría 36 meses y que requeriría estabilidad política, reconocimiento internacional, estado de derecho y que incluye la operacionalización de PDVSA.
Por su parte, la investigadora Genny Zúñiga desde sus “Perspectivas sociales” aseguró que las declaraciones del Gobiernos contrastan con la realidad del país.
“Necesitamos un marco institucional para poder pensar en prácticas de políticas públicas”, aseveró al afirmar, entre otras cosas, que no hay instituciones para atender a los enfermos de la tercera edad y seguridad social escasa.
Reveló que los estudios realizados por la UCAB, la Universidad Central de Venezuela y la Universidad Simón Bolívar indican que existe una coyuntura demográfica que no estamos aprovechando: 2,3 millones de jóvenes no están estudiando y 560 mil de ellos, son adolescentes. “La generación joven no está teniendo acceso a la educación”; la tasa de desempleo se ubica, según el gobierno, en 7%; 24% de la población ocupada no percibe una remuneración acorde con su trabajo y 33% tiene jornadas labores excesivas sin la compensación correspondiente ni suficiente.
Aseguró que la educación y el empleo son clave para el bienestar e invitó a reflexionar sobre las reservas de recurso humano con el que cuenta el país para superar la crisis y en la existencia de requisitos básicos para garantizar el bienestar social: derechos humanos, regímenes democráticos, disponibilidad de bienes y servicios, oportunidades y equidad social.
Desde el hemiciclo
El segundo vicepresidente del actual parlamento venezolano, Simón Calzadilla cerró el foro asegurando que hay propuestas y formas con la que Venezuela podrá salir adelante. Aseguró que la crisis actual responde a “decisiones lamentables que hicieron que se perdiera una oportunidad única en el país”, refiriéndose al liderazgo chavista. “Un modelo que se deterioró, fracasó y derivó en la crisis”, puntualizó.
Calzadilla cree que el 6 de diciembre se produjo un cambio en el país desde el punto de vista institucional. “Se rompió con el modelo Chávez”.
Aseguró que desde la Asamblea Nacional se busca abordar temas medulares para desmontar un modelo ineficiente pero también conscientes del reto de mantenerse como líderes y de esta forma pulsar las necesidades del pueblo.
Durante su ponencia se preguntó hacia dónde podría ir el pueblo insatisfecho. “Esa respuesta tiene nervioso al alto Gobierno y a la Asamblea Nacional”, dijo.