Informe AIN: En Cuba sigue restringida la libertad religiosa
En Cuba “el Estado comunista sigue restringiendo fuertemente la libertad de religión”, señaló el reciente informe de Ayuda a la Iglesia Necesitada (AIN), donde señala que si bien hay libertad de culto y se han devuelto algunos bienes, el Gobierno continúa ejerciendo control y no permite la existencia de colegios católicos.
El pasado 4 de noviembre AIN -fundación internacional de la Santa Sede- presentó su Informe Libertad Religiosa en el Mundo, que abarca desde octubre de 2012 hasta junio de 2014 y analiza la realidad de 196 países.
En el caso de Cuba, el documento indica que las restricciones que afectan a la Iglesia “no difieren de las que pesan sobre los actores no gubernamentales”, sin embargo “su efecto se siente profundamente ya que la Iglesia sigue constituyendo el actor más importante de la vida social”.
El informe recuerda que la Constitución cubana “reconoce y garantiza la libertad de conciencia y de religión”, sin embargo, exige a las diferentes confesiones estar registradas ante el Ministro de Justicia en el Registro de Asociaciones Religiosas; una inscripción que puede ser revocada “por algunas infracciones graves, por decisión del Consejo Ecuménico Nacional o por sentencia de un Tribunal Popular”.
Además, “el registro es necesario para tener autorización legal para recibir a visitantes extranjeros. También es necesario para importar bienes religiosos y para reunirse en casas autorizadas para celebrar el culto”, y “se requiere el permiso del Estado para viajar al extranjero por motivos religiosos”.
El documento recuerda que el régimen permitió la visita de Benedicto XVI en 2012 y en febrero de 2013 “aprobó la devolución a la Iglesia católica de algunas de las propiedades confiscadas por el Estado en 1961”.
Sin embargo, “el Partido Comunista –indica el informe de AIN-, ejerce control sobre la vida religiosa por medio de la potestad que tiene para aprobar las visitas religiosas, la compra de edificios religiosos, el uso de vehículos de motor, la celebración de actos religiosos en zonas públicas y la importación de textos religiosos”.
Además, “no están permitidos los colegios religiosos con la excepción de dos seminarios católicos y algunos centros interreligiosos de formación. El servicio militar es obligatorio sin que exista ninguna disposición legal relativa a la objeción de conciencia. No obstante, en la práctica, el Gobierno permite que se sustituya con alguna forma de servicio público civil, en vez del servicio militar”.
Asimismo, señala que los testigos de Jehová y los mormones siguen esperando un reconocimiento oficial y algunas Iglesias protestantes han denunciado acosos y multas “por parte de las autoridades, cuando intentan celebrar encuentros de oración. Algunos de sus pastores han sido arrestados por predicar en público”.
“La Iglesia católica y el Consejo de Iglesias de Cuba tienen autorización para realizar servicios religiosos en prisiones y centros de detención en las provincias. Sin embargo –indica el informe-, hay casos en que las autoridades de la prisión no informan a los presos de su derecho a asistir, o responden tarde a la solicitud de la visita, o limitan el número de visitas a dos o tres al año”.