¡La maravillosa Katie James!
Un querido amigo compartió un video de una cantante nacida en Irlanda, Katie James (Inishfree, una pequeña isla del sur de Irlanda, 1985), que muy niña llegó, para quedarse, a Colombia; desde pequeña sintió una irresistible atracción por la música; su instrumento es la guitarra. Aquí comparto con ustedes este magnífico descubrimiento, Oigámosla, de entrada, junto a Camilo Giraldo, en la «Tonada de luna llena«, del venezolano Simón Díaz:
Katie llegó con su familia a Colombia a los dos años de edad para vivir en la comunidad hippie angloirlandesa denominada Atlantis, y desde los nueve su pasión fundamental ha sido la música.
Estudió música por influencia de su madre, inglesa y de su padre, irlandés. Desde los nueve años aprendió a tocar el violín y a los trece compuso su primera canción. Vivió en Popayán durante cinco años aunque antes había vivido en Tolima, de donde ella y su familia debieron salir debido a la creciente ola de violencia. Oigámosla con el bambuco «El regreso», de Efraín Orozco (Grabado en una cabaña del Huila, Colombia).
Nos cuenta Joseph Casañas, en El Espectador: «Como la guerrilla temía que entre los irlandeses que estaban viviendo en El Pato, Caquetá, se infiltrara algún espía gringo, el comandante de la zona le ordenó a los foráneos que se largaran de allí. Corría el año de 1998 (…) . Asustados por la situación, los irlandeses armaron viaje en un dos por tres. Empacaron sus chiros y en tres viajes en chiva llevaron sus gallinas y sus matas hasta la vereda Pueblo Nuevo, en el departamento del Tolima. Allí, en ese paraje natural ubicado a una hora de Icononzo, la comunidad de irlandeses fundada por Jenny James intentó continuar con su estilo de vida: sembrando y cultivando su propio alimento y educando a sus hijos lejos de las ciudades.
Katie James, hija de Jenny, le dice a El Espectador que su mamá entendió la situación. “No era ingenua y sabía el conflicto que se libraba en Colombia, pero lo asumió de una manera muy tranquila, como un capítulo más de su vida”.
Ahora, tocando «Toitico bien empacao«; nos dice Katie lo siguiente: «Esta canción nació de mi lado más campesino… Vale aclarar, para quienes me ven como una extranjera, que crecí desde muy niña en una finca en el Tolima. Años después viví y estudié en Bogotá y pude ver la gran distancia que hay entre el campo y la ciudad… y no me refiero a las distancias físicas. Esto inspiró este bambuco… con el cual espero por lo menos despertar la curiosidad en algún adolescente urbano sobre lo que es, por ejemplo, la guatila!»
Aprendió a tocar la guitarra clásica ya establecida en Popayán, en el Conservatorio de Música de la ciudad. Su primer álbum Semillas de Paz lo grabó en el año 2003, junto a su hermana Louise James y a su amiga Laura Costello, en homenaje a los desplazados por los crímenes de los grupos armados colombianos y en memoria de su sobrino Tristán James y su compañero Javier Novoa, ambos víctimas mortales de la violencia criminal.
Aquí, en una entrevista donde cuenta la historia de su llegada a Colombia: