Los cubanos viajan más al extranjero y menos por la Isla
El crecimiento del turismo nacional fue imparable hasta el pasado año. (14ymedio)
La cayería norte de Cuba es un paraíso tropical que fue vedado durante décadas a los cubanos. En 2008, en medio de una severa crisis de liquidez, las reformas raulistas permitieron que por primera vez desde la apertura al turismo internacional en los 90, los nacionales pudieran hospedarse en hoteles en igualdad de condiciones que los extranjeros. Desde entonces, el crecimiento del turismo nacional ha sido imparable. Hasta el pasado año.
«El turismo nacional decreció en más de 90.000 veraneantes en 2016, según los datos de la Oficina Nacional de Estadísticas este otoño», explica Emilio Morales, director del grupo de la consultora Havana Consulting Group, con sede en Miami.
Los factores a los que Morales achaca la caída son fundamentalmente el alza de los precios de los hoteles ocurrida el año anterior como consecuencia del incremento del turismo internacional y una mayor cantidad de viajes al extranjero por parte de los cubanos.
«Cuba vivió recientemente un boom de turismo norteamericano, un mercado de mucho más poder adquisitivo que el resto de los mercados emisores de turistas a Cuba. Según cifras oficiales, 281.706 norteamericanos viajaron en 2016 a la Isla», explica Morales.
La respuesta del mercado turístico cubano, controlado en un 40% por el Grupo de Administración Empresarial, detrás del cual se encuentran las fuerzas armadas, fue elevar el precio de las habitaciones.
«Mi marido y yo íbamos por lo menos una vez al mes a Varadero, Viñales o Trinidad pero desde agosto pasado no hemos podido porque todos los precios se han disparado«, cuenta María Eugenia, de 61 años y residente en La Habana. «Lo que antes pagábamos por todo el viaje ahora no nos alcanza ni para una noche y sin coger transporte», lamenta.
«Los hoteles que más han subido de precio son los que están en los cayos, los de Varadero y cualquiera que esté en lo que se llama la línea de playa«, asegura María Eugenia. «Además no vale la pena ir como cubano porque hay mucho maltrato hacia el cliente nacional».
La respuesta del mercado turístico cubano ante el incremento de visitantes de EE UU fue elevar el precio de las habitaciones
Uno de los principales atractivos del todo incluido, las llamadas mesas buffet con consumo abierto, también han sufrido restricciones, según la jubilada. «No hay tanta variedad de productos y tampoco son tan libres porque ahora controlan la cantidad de platos fuertes (carne o pescado) que cada huésped puede comer y le dan un ticket para un número de bebidas».
THCG realizó un estudio sobre la red de hospedaje en el sector turístico cubano en 230 hoteles y verificó la escalada de precios desde el deshielo de Estados Unidos. «El estudio mostró un alza de precios en todas las categorías, con el mayor crecimiento en los hoteles de cinco estrellas, que pasó de un promedio de 185,88 dólares la noche en 2014 a 362,01 dólares en el 2016», detalla el experto. A medida que estos establecimientos se llenan, los turistas extranjeros que los ocupan empiezan a demandar habitaciones en hoteles de categorías inferiores, lo que incrementa también los precios de esas instalaciones turísticas.
Las cifras más sorprendentes se observan en los hoteles de cuatro estrellas, que pasaron de costar 110,82 dólares la noche en 2014 a 246,73. «El hotel Saratoga, uno de los favoritos de celebridades y políticos, llegó a cotizarse en el 2016 entre 700 y 1.000 dólares la noche, frente a los 375 como mínimo un año antes», añade Morales.
Esta escalada de precios afectó también al turismo interior, un sector que había crecido exponencialmente tras el deshielo iniciado por el expresidente Barack Obama que desbloqueó el envío de remesas a la Isla y contribuyó a desarrollar el incipiente sector privado del país.
Las cifras más sorprendentes se observan en los hoteles de cuatro estrellas, que pasaron de costar 110,82 dólares la noche en 2014 a 246,73
«En un estudio realizado por THCG en el año 2014 se pudo constatar que el 37% de los cubanoamericanos que viajaron a Cuba se hospedaban en los hoteles al menos un fin de semana con sus familiares residentes en la Isla, principalmente en el polo turístico de Varadero, los Cayos al norte de Villa Clara y en Guardalavaca, Holguín. Esta tendencia aumentó en los últimos años. Actualmente se estima que alrededor del 45% de los cubanoamericanos que viajan a la Isla se hospedan en algún hotel con sus familiares en Cuba por dos o tres días», explica Morales.
La responsable de una de las agencias de viajes a Cuba más prestigiosas con sede en Estados Unidos dijo bajo condición de anonimato a 14ymedio que la situación del turismo nacional e internacional «es crítica».
«Estuve en Cuba este noviembre para la Feria Internacional de La Habana y los cubanos están pidiendo que regrese el turismo. El Meliá Cohiba estaba a menos de un 30% de su capacidad, cuando el año pasado estaba repleto», explica.
«Con el aumento de los precios de los hoteles Cuba dilapidó una excelente oportunidad de mercado porque una vez que el turista se marcha a otro lugar no regresa», puntualiza.
Desde el 14 de enero del 2013 hasta el 24 de octubre de 2016 viajaron al exterior más de 779.000 cubanos residentes en la Isla, el 79% de ellos por primera vez. Aunque las cifras oficiales son engañosas porque cuentan como residentes en el país a quienes llevan menos de dos años en el extranjero. Aún así, se puede constatar un incremento en el número de viajeros al exterior.
Desde el 14 de enero del 2013 hasta el 24 de octubre de 2016 viajaron al exterior más de 779.000 cubanos residentes en la Isla, el 79% de ellos por primera vez
«En lo que va de año se ha alcanzado un 28% de crecimiento en relación con la misma etapa del año anterior», dijo recientemente a la televisión cubana Ernesto Soberón, director de Asuntos de Cubanos Residentes en el Exterior.
Morales cree que el motivo de estos viajes al exterior es diverso. «Se estima que en el periodo 2013-2016 alrededor de 130.000 cubanos viajaron por motivos migratorios, mientras que los 541.000 restantes lo hicieron por motivos de trabajo, turísticos y de negocios», explica. El investigador pone como ejemplo a los más de 100.000 cubanos que viajaron a México en 2016, «convirtiéndose en el segmento turístico de Latinoamérica de mayor crecimiento que visita México por vía aérea, con un crecimiento de 58,4% con respecto al año anterior».
«Los cubanos tienen como destinos más populares EE UU, México y República Dominicana», explica Morales, que cree que la situación precisa de un análisis serio por parte de quienes trazan las estrategias del sector turístico en la Isla.
«Es evidente que el no tener una oferta balanceada en precio y opciones recreativas hace que el creciente turismo nacional vaya a satisfacer sus necesidades de ocio hacia otros mercados. Sin duda, los turistas cubanos están descubriendo mejores opciones fuera de las fronteras cubanas», agrega.