“Nos preocupa el acceso de Rusia y China a América Latina”: HRW
En entrevista con EL COLOMBIANO, la directora de Human Rights Watch para las Américas, Juanita Goebertus, habló de paz con ELN, Venezuela y los retos de la región.
Juanita Goebertus fue representante a la Cámara por Bogotá y es experta en paz y derechos. Actualmente es la directora de HRW División Américas. FOTO COLPRENSA
La directora de Human Rights Watch, Juanita Goebertus, conversó con EL COLOMBIANO sobre la pérdida de la democracia en varios países de la región y dijo que le preocupa el acceso de China y Rusia a América Latina y la poca acción de Estados Unidos ante ello.
También respondió por violaciones a los Derechos Humanos (DDHH) en regímenes como el de Daniel Ortega, en Nicaragua; y Nicolás Maduro, en Venezuela, y a retos locales como los diálogos de paz con el ELN y los acercamientos con Venezuela.
Goebertus es magíster en derecho internacional de la Universidad de Harvard y llegó a dirigir la división de las Américas de HRW tras la salida del exdirector José Miguel Vivanco, quien duró 30 años en ese puesto.
¿Cómo ha sido recibir ese cargo y qué ha sido lo que más le ha preocupado de la región?
“Lo que he hecho es conocer de primera mano el trabajo del equipo de varios de los países en los que trabajamos. He estado en Brasil, en México, haciendo incidencia también en Bruselas, la Unión Europea y en Washington, frente al gobierno de Estados Unidos. Lo principal y lo más preocupante es la pérdida dramática en muchos de estos países de de confianza en la democracia, en los partidos, en las instituciones en general. El hilo conductor es la pérdida de sentido del contrato social, esta idea de que los ciudadanos cada vez estén menos los beneficios que les puede traer la democracia, y eso a su vez ha generado un aumento en la polarización”.
Usted recibe un puesto de una persona que duró 30 años en ese cargo. Algunos insisten en que HRW tenía peso por el liderazgo de Vivanco, ¿qué tan real o qué tan infundado es eso y cómo ha sido enfrentarse a esas críticas?
“Pues es innegable que Vivanco ha sido un líder muy importante en toda la región que llevó el discurso de los derechos humanos a lo largo y ancho de Latinoamérica, siendo además en mi opinión muy vehemente sin importar si se estaba enfrentando a gobiernos de izquierda y de derecha. Parte de mi trabajo es asegurar que los niveles de rigurosidad que él puso en marcha dentro de la organización en la investigación, y la inmensa capacidad de incidencia en los distintos gobiernos se mantenga. Tengo la inmensa fortuna de contar con el mismo equipo con el que él contaba. Gracias a ese trabajo y legado construido por Vivanco, eso va a ser posible”.
Usted ha dicho que la falta de atención de Estados Unidos ha permitido que China y Rusia tengan más acceso en América Latina. ¿Por qué le preocupan esas injerencias de esos países?
“China ha entrado en una lógica absolutamente pragmática, en donde no hay una conversación sobre derechos humanos, entre otros, porque ellos mismos cometen gravísimas violaciones a derechos humanos en sus propios territorios y lo que les interesa es una relación comercial pragmática donde estás discusiones están fuera de la mesa.
En el caso de Rusia, que si bien ha tenido una injerencia inferior, hemos visto algunos de los casos de cooperación militar de nuevo en donde la pregunta por condicionamientos en materia de derechos humanos está por fuera de la mesa. Esa es la razón por la cual este cambio en los poderes y en la forma en la cual sea la región nos preocupa”.
Algunos han pedido intervención militar para el momento de crisis que vive Haití, ¿cree que es el camino correcto?
“El caso de Haití es sin duda una de las regiones más preocupantes en términos de la ausencia de un Estado legítimo que pueda prestar las más básicas funciones. Yo si creo que este tipo de fenómenos que tiene mucho más que ver con una misión de fortalecimiento de las capacidades de policía y de funcionarios encargados de hacer cumplir la ley y de capacidades de administración de justicia en el territorio, que de una misión militar propia de contextos de guerra que no es lo que estamos viendo en el caso de Haití”.
En Nicaragua hay una persecución constante a los sacerdotes y dicen los que están allá que se están agotando los caminos de diálogo con Daniel Ortega, ¿ cuál cree usted que es el camino para resolver esa crisis política?
“Nicaragua es una dictadura. Nosotros hemos documentado más de 195 personas que están presas por razones políticas, en muchos de los casos además sometidas a distintos tipos de violaciones a derechos humanos durante su cautiverio, hay más de 200.000 solicitudes de asilo en distintos países de la región parte de nicaragüenses.
Nos preocupa los ataques sistemáticos que ha sufrido la iglesia católica y que el Vaticano se mantenga tan distante y tan poco activo en la búsqueda de una solución negociada real, que no solamente atienda la problemática de los representantes de la Iglesia Católica, sino que busque ubicar, así sea solo con reconocimiento a mediano plazo, una solución negociada para Nicaragua”.
Ahora que hay naciones abriéndose otra vez hacia Venezuela y que EE.UU. empezó a levantar bloqueos, ¿han notado avances en el respeto por los DDHH?
“No, de ninguna manera. Por el contrario, Venezuela sigue siendo uno de los países donde hay más violaciones a derechos. Hemos documentado más de 250 presos políticos y 7 millones de migrantes que han tenido que salir por distintas razones del país. Nosotros lo que hemos señalado es que vemos con buenos ojos que Colombia busque retomar una relación bilateral que permita proteger los derechos humanos de los habitantes de la frontera, pero hemos puesto también sobre la mesa la importancia de que eso se haga sin desconocer las gravísimas violaciones a derechos humanos que ocurren a diario en Venezuela”.
HRW ha denunciado que la Fuerza Armada de la Guardia Bolivariana han llevado a cabo operaciones conjuntas con combatientes del ELN, y que han sido cómplices de esos abusos, ¿eso sigue ocurriendo?
“Respaldamos la importancia de retomar el diálogo entre el gobierno colombiano y la guerrilla del ELN. La búsqueda de la paz es un mecanismo fundamental para la protección de los derechos humanos tanto en Venezuela como en Colombia. Dicho eso, es fundamental para que un proceso como ese pueda salir adelante que los combatientes del ELN no puedan seguir delinquiendo desde Venezuela, de lo contrario ese proceso estaría destinado al fracaso porque para el ELN siempre sería más lucrativo seguir dirigiendo desde territorio venezolano”.
Jair Bolsonaro no ha reconocido oficialmente el triunfo de Lula en Brasil y ya se habla de intervenciones militares, ¿cree que hay un riesgo de golpe de Estado o de inestabilidad política?
“Si bien como usted dice él ha sido poco claro en el reconocimiento de resultados, Bolsonaro ha permitido que la transición se inicie y ha ordenado a personas de su gabinete poner a disposición del gobierno del grupo de empalme de el presidente electo Lula Silva.
Hoy Bolsonaro se quedó con muy poco espacio de disfrutar esos resultados electorales a pesar de las distintas alertas que se habían levantado sobre la utilización política de las fuerzas militares, y de las policías a nivel estatal estos no sucedió, y en cambio se han mantenido en defensa tanto del resultado electoral como de las instituciones, yo confío en que la transición del paso del gobierno Bolsonaro, al gobierno Lula, se haga de manera pacífica en Brasil.
DANIELA OSORIO ZULUAGA : Comunicadora Social – Periodista de la UdeA. Amo leer historias y me formé para contarlas.