“Obama debe hablar en Cuba de democracia”, afirma Martha Beatriz Roque
La opositora sugiere a Obama hablar de “la posibilidad de la democracia” en su discurso en Cuba
Tras abrazar a su hermana por primera vez en 55 años a su arribo a Miami la semana pasada, la opositora cubana Martha Beatriz Roque llamó al presidente Barack Obama a enderezar el proceso de normalización de las relaciones con Cuba.
La única mujer procesada en la causa “de los 75”, varias veces encarcelada desde que comenzó a militar en la oposición hace tres décadas, Roque recibió un permiso especial de las autoridades cubanas para salir del país por una vez, junto a otros seis ex presos políticos, en lo que muchos consideran una medida alentada por el próximo viaje de Obama a la isla.
De 70 años, fue condenada a 20 de cárcel por “atentar contra la seguridad del estado cubano”, durante el juicio a los 75 opositores en el 2003, y fue liberada con una “licencia extrapenal por motivos de salud” en el 2004. En el 2012 protagonizó una huelga de hambre en protesta por las detenciones arbitrarias a disidentes. Ahora dirige la Red Cubana de Comunicadores Comunitarios y colabora con la agencia independiente de noticias Cubanet.
Economista de profesión, una de las autoras del documento “La Patria es de Todos”, Roque se considera miembro de una disidencia histórica, “más educada”, lo cual explicaría por qué el gobierno ha intentando con particular esfuerzo “desprestigiarla”, mostrando incluso reportajes sobre ella en la televisión nacional.
“Preferiría que fuera una persona vulgar, no educada”, para facilitarles la labor de desprestigio, agrega.
“Uno de los objetivos de la policía política es matar socialmente a las personas”, continúa. “Es un diseño. Cuando yo comencé en la oposición, yo era profesora de la Universidad, y fueron hablando con todo el mundo. Es un proceso de aislar totalmente a la persona”, señaló.
La activista contó en detalle, en una conversación con el Nuevo Herald, cómo cada vez que intentó ver a un Papa—Benedicto XVI y más recientemente a Francisco—fue detenida por fuerzas policiales y tratada como “una delincuente”. Preocupada por lo que llamó el “daño colateral” de la visita del presidente Obama, comentó que lo mismo podría ocurrir con los disidentes que quisieran reunirse con él.
Según la opositora, el aumento de la represión durante el primer año del “deshielo”, lo que desafía la lógica diplomática y política, responde a la “prepotencia del régimen. Son personas a las que le han dicho que son los dueños de todos nosotros. La oposición–lamentó–está multiplicada por cero, ni siquiera tenemos la posibilidad de ir a ver al Papa”.
Sobre la próxima visita del presidente Obama versó el resto de la conversación, de la que aparece aquí una versión más corta.
¿Qué entiende por “enderezar” las negociaciones con el gobierno cubano?
Se habla mucho de empoderar al pueblo, de la pequeña y la mediana empresa (PYME). En Cuba no existen. Para mí enderezar las conversaciones significa que esto fuera algo real porque la propiedad privada en Cuba es anticonstitucional.
¿Cómo es posible que se piense en trasladar a Cuba un poco de capitalismo si también la Constitución dice que el socialismo es irreversible?
¿Qué cree, entonces, de esa tesis que asume que el empoderamiento de un naciente empresariado eventualmente conducirá a cambios políticos en Cuba?
Es imposible empoderar a una población que es esclava. Cualquier negocio o cualquiera inversión que se haga en Cuba en estos momentos está sometida a las leyes cubanas. El trabajador no tiene la libertad de contratarse por sí mismo ni el inversionista puede contratarlo. Los que traigan a Cuba su capital no pueden tener siquiera personas de su confianza trabajando para ellos porque no lo admite la ley cubana. El trabajador cubano es un esclavo, al igual que el pueblo de Cuba (…) Del salario que le toca al trabajador, ¿qué parte le toca el trabajador y qué parte le toca al régimen? El trabajador es un esclavo del sistema y pienso que no se puede empoderar a un pueblo esclavo.
¿Qué impacto real ha tenido el cambio de política de EEUU hacia Cuba, a nivel de la vida cotidiana de los cubanos?
El 17 de diciembre de 2014 se abrieron muchas expectativas. El pueblo cubano pensó que se iban a crear soluciones. Cuando [el secretario de Estado John] Kerry fue a Cuba en agosto, le dije que esas expectativas se han perdido y lo que va a suceder es que los cubanos se van a ir del país, y las estadísticas han apoyado lo que he dicho.
En todo este año, ha habido más cubanos saliendo de la isla que con antelación. Las personas tienen miedo que con esta política de Obama, se termine [la política de] “pies secos-pies mojados”, la Ley de Ajuste y todo el mundo lo que quiere es llegar. Y el cubano que va a venir para acá, no es el cubano que vino hace muchos años porque desafortunadamente en el país se ha perdido la ética, la educación formal; y esto no va ayudar a la comunidad cubana en Miami.
Dentro de la isla, no hay algo que pueda indicar una mejoría de los derechos humanos, y me preocupa que cada vez que se habla por ejemplo con Kerry, con el propio presidente, los derechos humanos se circunscriben única y exclusivamente a la oposición interna.
Nosotros somos apenas unos cientos, quizás unos pocos de miles de personas en la oposición. No te digo disidentes, porque disentir, disiente casi todo el pueblo pero los que nos atrevemos a oponernos, no somos muchos. Los derechos humanos se le violan a todo el pueblo de Cuba, no solamente desde el punto de vista social sino también económico. Hasta los derechos culturales se violan, porque culturalmente tenemos que hacer como pueblo lo que el régimen quiere. No ha habido un proceso de desarrollo para pensar que esto va mejorar y no creo que este año pueda haber una mejoría, independientemente de que del 16 al 18 abril se va a celebrar el próximo Congreso del Partido.
¿Qué debería incluir Obama en la agenda para que su visita tuviera un significado no solo a nivel simbólico?
El viaje es corto y va a tener una serie de compromisos oficiales. Por ejemplo, a la esposa del Presidente, seguro la va a tomar la FMC [Federación de Mujeres Cubanas] y la va a llevar a la escuela de niños con [síndrome de] Down, al hospital de los niños que están con cáncer, lugares que el régimen mantiene para visitantes.
Al pueblo de Cuba le interesaría que Obama le trajera nuevamente la esperanza que perdió totalmente, si hablara de la posibilidad de la democracia, que sólo se puede obtener si el régimen hace cambios—que no lo vemos en ningún lugar— y si no persiste en la herencia familiar; porque todos sabemos que después de Raúl está su hijo y ahí está [su yerno] el que era esposo de Deborah [Castro Espín]. Todas estas personas están preparadas para continuar lo que se ha hecho hasta ahora. De forma equívoca algunas personas piensan que [el sucesor de Raúl Castro] será Díaz-Canel pero él está ahí tapando un hueco.
Hay unos cuantos mensajes que Obama puede enviar. Si se reúne con la oposición interna, eso sentaría una evidencia de que quien va a Cuba puede reunirse con la oposición interna, porque hemos visto pasar presidentes, primeros ministros, personalidades, y nadie quiere reunirse con la oposición interna.