Democracia y PolíticaEconomía

¿Qué hizo Perú para lograr su crecimiento económico sostenido?

Bajo la Constitución peruana, como soporte legal, Perú estabilizó y abrió el país a una economía de mercado en la década de los ‘90; y para ello se tomaron medidas que se pueden agrupar en 4 grandes lineamientos, entre los que se encuentran: la independencia del Banco Central y un “pacto social” de respeto a las decisiones que se tomaron en ese momento, el cual se mantiene independientemente de la coyuntura política que atraviesen.

 

La economía peruana tuvo un pobre desempeño desde mediados de la década de los ‘70, sobre todo por una grave crisis de deuda, la cual se acumuló, principalmente, durante la dictadura de Juan Velasco Alvarado. Los siguientes gobiernos intentaron renegociar dicha deuda sin resultados exitosos, a pesar de haber recurrido a la ayuda financiera del Fondo Monetario Internacional (FMI).

Alan García llega al poder en 1985 con un discurso reivindicativo a lo interno y confrontacional hacia el FMI. Aplicó una serie de medidas heterodoxas (controles de precios, aumento de salarios, reducción de tasas de interés, fijación del tipo de cambio, entre otras), las cuales tuvieron cierto éxito al comienzo de su gestión. Con el pasar del tiempo quedó en evidencia la insostenibilidad de las mismas y la economía comenzó su colapso.

“Nuestra crisis política nos llevó en otra dirección, una de empobrecimiento profundo, pero también de aprendizaje”

En el momento de terminar su mandato, la economía peruana se encontraba en una profunda recesión y en medio de una hostil hiperinflación, la cual, al igual que en nuestro caso, llevó a la sociedad peruana a refugiarse en el dólar estadounidense para tener un ancla nominal en sus transacciones económicas.

Al gobierno entrante de Alberto Fujimori le tocó hacer los correctivos necesarios para estabilizar y abrir la economía del país. Las medidas que tomaron se pueden agrupar en 4 grandes lineamientos1:

    • Independencia del Banco Central de la Reserva del Perú: La misma Constitución de 1993 consagra la autonomía de la institución, además de prohibirle cualquier financiamiento al Poder Ejecutivo. Con ello sentaron las bases de la disciplina fiscal y la estabilidad monetaria de las décadas siguientes.
    • Rol subsidiario del Estado: También con respaldo constitucional en el Artículo 60: “… Solo autorizado por ley expresa, el Estado puede realizar subsidiariamente actividad empresarial”. Con esta disposición el Estado solo podía llevar a cabo las actividades económicas que no se pudiesen realizar desde el sector privado.
    • Apertura de inversiones: La inversión empezaba a contar con un sólido piso jurídico que garantizaba seguridad y estabilidad a empresas y personas que viesen oportunidades en Perú. Además, en la misma constitución se garantiza las condiciones tanto para la inversión nacional como la extranjera.
    • Liberta de contratación: No sólo se garantiza el derecho a la libertad de contratación, sino que también se prohíbe la modificación de los términos contractuales a través de nuevas leyes o disposiciones.

Si bien la economía comenzó a crecer en 1993, se sentaron las bases de un crecimiento robusto que se sostiene hasta la actualidad a pesar de su inestabilidad política. Otro hecho llamativo fue la confianza que ganó el Sol peruano a lo largo de estos 33 años. No fue algo casual, sino el producto de un Banco Central verdaderamente autónomo y de variables macroeconómicas estables. Al ser yo de Venezuela y percibiendo las similitudes de nuestras crisis económicas, en una oportunidad pude preguntarle a Diego Macera, director del Banco Central de la Reserva del Perú, si no habían considerado dolarizar por completo la economía, su respuesta vehemente fue: “Teníamos un plan y estábamos convencidos de que nos iba a funcionar”. La razón de mantener su moneda era clara, no querían ceder una herramienta importante de política económica, no querían ceder su política monetaria.

 

Otra arista esencial es el rol de los cambios institucionales que llevaron adelante para darle viabilidad y sostenibilidad a su nueva economía. Si releen los cuatro lineamientos pueden notar que cito artículos de la Constitución peruana, los cuales sirvieron de soporte legal a lo que vendría. Y por último, y no menos importante, aunque no se destaque de manera explícita, pareciera haber un pacto social de respeto a las decisiones que se tomaron en ese momento, el cual se mantiene independientemente de la coyuntura política que atraviesen.

Paradójicamente Venezuela llevó adelante, casi de manera síncrona con Perú, una serie de medidas similares a las que ellos implementaron. Quizás sin tanto piso político-institucional, pero sí con un sesgo de apertura económica que apuntaba hacia la corrección de desequilibrios macroeconómicos y también hacia una economía de mercado. Nuestra crisis política nos llevó en otra dirección, una de empobrecimiento profundo, pero también de aprendizaje.


(1)Macera Poli, Diego, Estabilización macroeconómica: el caso peruano, (Lima, Perú, I Encuentro Regional de Juventudes Venezolanas en el Exterior).


*El gráfico fue facilitado por el autor, Henkel García U., al editor de La Gran Aldea.


@HenkelGarcia

 

Botón volver arriba