Recordemos las Leyes de Murphy
¿Quién no ha oído hablar de las Leyes de Murphy? Es conveniente recordarlas de vez en cuando, aunque solo sea para distraernos del día a día, darle un poco de levedad a nuestros aconteceres y una oportunidad a la sonrisa…
Así como a lo largo de la historia hemos recibido de parte de eruditos y sabios leyes morales, del Universo, del Orden Cósmico, el karma, leyes lógicas, leyes físicas y matemáticas, o de la estética…Bueno, a mediados del siglo XX comenzó una ola indetenible de nuevas leyes, llamadas «Leyes de Murphy«.
La ley de Murphy es un enunciado basado en un principio empírico-pesimista (otros lo llamarían «escéptico-realista») que trata de explicar los hechos acontecidos en todo tipo de ámbitos. A grandes rasgos, se basa en el adagio siguiente: «Si algo malo puede pasar, pasará».
¿Quién, cómo y cuándo las creó? Como siempre ocurre, hay diversas versiones, pero todas coinciden en que la ley inicial fue enunciada por el ingeniero Edward A. Murphy Jr., que trabajó en 1949 en experimentos con cohetes sobre rieles, realizados por la Fuerza Aérea de los Estados Unidos.
De acuerdo con Robert Murphy (hijo de Edward), la frase de su padre fue algo así como «Si hay más de una forma de hacer un trabajo y una de ellas culmina en desastre, alguien lo hará de esa manera».
La frase salió de su contexto original, por primera vez, durante una conferencia de prensa en la que se le preguntó a un capitán, de apellido Stapp, por qué nadie resultó con heridas de importancia durante las pruebas. Stapp explicó que fue porque se tomó en consideración la Ley de Murphy. Luego citó la ley y aclaró su significado: que era importante considerar todas las posibilidades antes de hacer una prueba.
En 1952 apareció la frase «Todo lo que pueda salir mal, pasará» en un epígrafe del libro The Butcher: The Ascent of Yerupaja, de John Sack. Pero fue realmente popularizada por el libro de Arthur Bloch «La Ley de Murphy«, en 1977, y sus secuelas La Ley de la Señora Murphy y La Ley de Murphy del 2000. Del mismo modo, posteriormente han salido decenas de libros sobre las leyes y las mujeres, el amor, los trabajadores, etc.
Un ejemplo frecuentemente citado de ley de Murphy es que una tostada untada con mantequilla siempre caerá al suelo por ese lado untado, nunca por la parte desnuda.
Existe una demostración física para el hecho de que efectivamente la tostada tiene mayor probabilidad de caer del lado de la mantequilla. El factor principal es la altura de la mesa, por la que la tostada tiene ‘tiempo’ de darse media vuelta, no por el peso de la mantequilla como errónea e intuitivamente se supone. Robert Matthews, investigador de la Aston University, en Birmingham (Inglaterra) recibió en 1996 el Premio Ig Nobel de Física por un estudio sobre un derivado de esa ley de Murphy, es decir, por la demostración del caso de la tostada con base en las constantes fundamentales. Los lg Nobel de Física son unos premios estadounidenses que se entregan anualmente a los diez científicos que, con sus hallazgos, “primero han hecho reír y luego, pensar”.
La Ley de Murphy se esparció rápidamente a otras culturas técnicas relacionadas con la ingeniería, pero inmediatamente comenzaron a surgir variantes debidas a la imaginación popular, de la cual han surgido decenas de nuevas leyes, teorías, corolarios, extensiones, postulados, paradojas, axiomas, factores, observaciones, comentarios y decretos; por ejemplo, el modelo del pan con mantequilla podría reformularse así: «La probabilidad de que una rebanada de pan untada de mantequilla caiga con el lado de la mantequilla hacia abajo, es proporcional al precio de la alfombra».
Veamos ahora algunos ejemplos:
1. Ley de reparación mecánica: después de que sus manos se llenen de grasa, su nariz comenzará a picar y tendrá que ir al baño.
2. Ley de la gravedad: cualquier herramienta, cuando se deja caer, rodará hasta la esquina menos accesible.
3. Ley de la probabilidad: la probabilidad de ser observado es directamente proporcional a la estupidez de su acto.
4. Ley de los números aleatorios: si marca un número incorrecto, nunca obtendrá una señal de ocupado y siempre habrá alguien que responda.
5. Ley de la mujer desesperada: La velocidad del viento aumentará proporcionalmente al costo del peinado.
6. Conductor de variación de Guy: si cambia de colas o de carriles de tráfico, aquel en el que estaba siempre se moverá más rápido que la cola o carril donde se encuentra ahora. Esto también funciona en supermercados y tiendas.
7. Ley del Baño: Cuando el cuerpo está completamente sumergido en agua, suena el teléfono.
8. Decreto de encuentros cercanos: la probabilidad de encontrarse con alguien que conoce aumenta drásticamente cuando está con alguien con quien no quiere que lo vean. Este también es el caso si eres mujer y has salido sin maquillaje, con tu peor ropa y con el pelo graso.
9. Ley de la oficina de Murphy: cuando intentas demostrarle a alguien que una máquina no funciona, lo hará. Esto también sucederá cuando le demuestres a alguien que algo en la computadora es fácil, y no funciona.
10. Ley de la biomecánica: la gravedad del picor es inversamente proporcional al alcance.
11. Ley de la mentira (está más de moda que nunca): No importa la frecuencia con que se demuestre que una mentira es falsa. Siempre habrá cierto porcentaje de gente que crea que es verdad.
12. Primera Ley de Finagle: Si un experimento funciona, es que algo ha ido mal.
13. Paradoja de Murphy: Siempre es más fácil hacerlo de la forma más difícil.
14. Ley de Murphy sobre la termodinámica: Todo empeora a elevadas presiones.
15. Observación de Oiens: La forma más rápida de encontrar algo es empezar a buscar otra cosa.
16. Ley de Park sobre primas de seguros e impuestos: Todo lo que sube, permanece arriba.
17. Ley de Johnson y Laird: Los dolores de muelas empiezan siempre los viernes por la noche.
18. Corolario de la anterior: Si usted es el jefe, los dolores de muelas de sus empleados empiezan siempre los lunes por la mañana.
19. Ley de Parsons sobre los pasaportes: Nadie es tan feo como en la foto del pasaporte.
20. Paradoja de Siverman: Si la Ley de Murphy tiene que salir mal, saldrá mal.
21. Extensión de Gattuso sobre la Ley de Murphy: Nunca nada es tan malo como para que no pueda empeorar.
22. Ley de Murphy sobre el Gobierno: Si algo puede ir mal, lo hará por triplicado.
23. Leyes femeninas sobre los hombres: a) Nada mejora con la edad; b) Cuando un hombre dice que quiere dormir contigo es una expresión literal.
24. Ley de Schopenhauer sobre la entropía: Si se añade una cucharada de vino a un barril lleno de deshechos, se obtienen deshechos. Si se añade una cucharada de deshechos a un barril lleno de vino, se obtienen deshechos.
25. Ley de Hutchins: No se puede hablar más que un hombre que no sabe de lo que está hablando.
26. Comentario de Kirby sobre los comités: Un comité es la única forma de vida que tiene doce estómagos, pero carece de cerebro.
27. Teoría de Goia: La persona menos cualificada es la que da más opiniones.
28. Teoría de Owen sobre la desviación organizativa: Toda organización tiene asignado un cierto número de plazas para que las ocupen personas no cualificadas.
29. Principio de Rockefeller: Nunca haga nada que sólo le gustaría que le vieran haciéndolo una vez muerto.
30. Ley de Drew sobre las prácticas profesionales: El cliente que paga menos es el que más se queja.
31. Primera Ley del debate: Nunca discuta con un tonto. Puede que la gente no aprecie la diferencia.
32. Axioma de Gourd: Una reunión es una situación en la que se levantan actas y se pierden horas.
33. Principio de Peter: En cualquier jerarquía, todo empleado tiende a incrementar su nivel de incompetencia.
34. Placebo de Peter: Un gramo de imagen equivale a un kilo de rendimiento.
35. Fenómenos telefónicos de Frank:
A. Si tiene lápiz, no tiene papel.
B. Si tiene papel, no tiene lápiz.
C. Si tiene las dos cosas, nadie le deja un recado.