Redes criminales venden certificados de PCR falsos para viajar por la UE
Europol alerta a los estados miembros de que grupos dedicados al crimen organizado y estafadores individuales están lucrándose con certificados falsos de test de coronavirus. En España, se han detectado tres casos por los que han sido detenidas al menos doce personas
Alerta de Europol a todos los países europeos: cada vez más grupos dedicados al crimen organizado y estafadores individuales están lucrándose con la venta de certificados falsos de test PCR a personas que los necesitan para viajar entre países de la Unión Europea. El organismo policial mencionaba varios casos detectados en las últimas semanas en países como Francia, Reino Unido, Países Bajos e Irlanda.
También en España. En concreto en nuestro país se han detectado tres casos con un saldo de al menos doce personas detenidas, según fuentes policiales consultadas por Vozpópuli. “Por el momento en nuestro país se trata de estafadores individuales y solo ha habido casos puntuales”, añaden las mismas fuentes.
La primera de las tres detenciones en España se produjo el pasado 14 de diciembre. La Policía Nacional arrestaba en Madrid a una mujer de 26 años por expedir certificados falsos de pruebas PCR negativas que vendía a cambio de 40 euros a través de páginas de compraventa como Wallapop o Milanuncios. En sus anuncios explicaba que estos certificados eran válidos para viajar a cualquier país y, además, se jactaba de que varias personas los habían utilizado ya sin tener ningún problema por ello en los aeropuertos españoles y en sus ciudades de destino. Se abrió una investigación en su contra por un presunto delito contra la salud pública y otro de estafa documental.
Apenas unas semanas después, el 4 de enero, los Mossos d’Esquadra arrestaban en el aeropuerto de El Prat de Barcelona a diez ciudadanos paquistaníes que trataron de embarcarse con test PCR falsos rumbo a su país, con escala en Abu Dabi. Una “estafa de riesgo epidemiológico”, en palabras del consejero de Interior de la Generalitat, Miquel Sàmper, por la que fueron detenidos y por la que los Mossos mantienen abierta una investigación para determinar si existe alguna organización criminal en Cataluña dedicada a falsificar pruebas PCR de coronavirus. Según adelantó La Vanguardia, los detenidos declararon haber comprado en una agencia de viajes de Barcelona sus billetes y un certificado de test PCR negativo a cambio de 550 euros.
Ya en el mes de febrero, el pasado lunes, la Policía Nacional detenía a un hombre en Madrid que se hacía pasar por facultativo para realizar, a cambio de 100 euros, pruebas PCR. Los certificados que les entregaba después a sus pacientes en realidad eran burdas fotocopias de un certificado auténtico de un laboratorio en las que cambiaba el nombre y los datos de los compradores, según fuentes policiales consultadas por Vozpópuli. Se le investiga como presunto autor de los delitos de estafa, falsedad documental e intrusismo laboral.
Delito en auge, según Europol
No se trata de tres casos aislados de picaresca española, sino de un delito en auge con el que se están lucrando estafadores particulares y también redes dedicadas al crimen organizado en media Europa. Así lo alertó esta semana Europol, organismo policial que ha instado a los países miembros a extremar la vigilancia por el alto riesgo a que este tipo de estafa documental, que en España puede ser penado también con un delito contra la salud pública, se mantenga mientras duren las restricciones de viajes en los países de la UE para frenar la expansión del coronavirus.
“La detección de certificados de test falsos de covid-19 confirma que los delincuentes –ya sean grupos del crimen organizado o estafadores individuales- aprovechan la oportunidad de lucrarse cada vez que surge”, indicaba Europol en su alerta. “Mientras se mantengan vigentes las restricciones de viajes es altamente probable que la producción y venta de certificados falsos prevalecerá”, añade.
Crimen organizado
En su informe remitido el pasado lunes, Europol mencionaba casos más sofisticados en los que participan grupos criminales como ‘Rathkeale Rovers’– organización operativa en Irlanda- a la que se atribuye la creación de una aplicación móvil que permitía a los estafadores falsificar manualmente pruebas de coronavirus a cambio de dinero.
Ha habido casos en varios países y también con tarifas muy distintas, de acuerdo a la información difundida por Europol. Una red detectada en el aeropuerto de Luton, en Reino Unido, cobraba los certificados falsificados de PCR negativas a cambio de unas 100 libras (113 euros). Otra desmantelada en el aeropuerto Charles de Gaulle, en París, los vendía a cambio de entre 150 y 300 euros; mientras en Países bajos los certificados falsos se vendían por entre 50 y 60 euros a través de aplicaciones de mensajería instantánea como Whatsapp y Snapchat.