El libro que describe el cambio de Chile entre 1910 y 2010: “Del centenario a los chilennials”
Los economistas Pedro Dosque y José Tomás Valente analizan las modificaciones que vivió el país en áreas como salud, infancia y el rol de la mujer; enfocados en la vida de las personas tras los datos duros. «Del centenario a los chilennials. 100 años de transformaciones y 25 tendencias que cambiaron Chile» es presentado hoy por los ex ministros de Educación Mariana Aylwin y Harald Beyer.
“Hoy somos los millenials chilenos o ‘chilennials’ quienes aplaudimos, cobramos cuentas y cuestionamos a las generaciones que nos precedieron por el país que nos heredaron, pero los ‘arqueólogos’ económicos e históricos del futuro nos cobrarán cuentas también a nosotros”, señala uno de los últimos párrafos del prólogo del libro “Del centenario a los chilennials. 100 años de transformaciones y 25 tendencias que cambiaron Chile” (Ediciones UC) escrito por el economista e historiador Pedro Dosque y el economista José Tomás Valente.
Los chilennials es una generación que se unió en torno a las demandas estudiantiles, que tiene sus representantes en el Congreso, pero que ahora tiene el desafío de pasar de la crítica a sus antecesores, a pensar en el Chile que ellos heredarán a sus nietos”, dicen a El Líbero los autores.
El texto da cuenta de una investigación de tres años en la que los investigadores del Centro Latinoamericano de Políticas Económicas y Sociales (Clapes UC) analizaron las historias humanas tras los cambios que ocurrieron entre 1910 y 2010 en cinco áreas: educación, rol de la mujer en la sociedad, infancia, salud y vivienda. Y que hoy será presentado por los ex ministros de Educación, Mariana Aylwin y Harald Beyer en el Aula Magna del Edificio MBA de la Universidad Católica.
En el prólogo “Del centenario a los chilennials. 100 años de transformaciones y 25 tendencias que cambiaron Chile”, escrito por el actual ministro de Hacienda Felipe Larraín, se lee: “Se trata de una narración que no se ubica en el plano de las teorizaciones de los investigadores, la gran historia o las evaluaciones socioeconómicas, sino en el quehacer cotidiano de los chilenos, en sus expectativas y preocupaciones, en las condicionantes de su calidad de vida, incluso en sus sueños”.
Los autores del libro, Pedro Dosque y José Tomás Valente, señalan a “El Líbero” que “un periodo de cien años puede sonar como mucho tiempo, pero la verdad es que no es tanto. Alguien que cumplió 44 años en 2018, nació en 1974. Si sus padres lo tuvieron a los 28 años, tuvieron que haber nacido en 1946. Si, a su vez, los padres de ellos los tuvieron a la misma edad, estos nacieron en 1918″.
Al ser consultados por el término “chilennials”, los autores cuentan que “los millenials chilenos o chilennials como nos gusta llamarnos –nos incluimos-, es la nueva generación que está ingresando a la arena pública y a pensar en el Chile del siglo XXI” y añaden que se trata de una “generación que se unió en torno a las demandas estudiantiles, que tiene sus representantes en el Congreso, pero que ahora tiene el desafío de pasar de la crítica a sus antecesores, a pensar en el Chile que ellos heredarán a sus nietos”.
Los investigadores explican que la importancia de revisar la vida tras los datos duros de los últimos 100 años se debe a que “muchas veces nos quedamos solo en las cifras o las series de tiempo de crecimiento económico. A veces también resumimos la calidad de vida en índices que no todas las personas entienden o enunciamos que para tal año seremos un país desarrollado según tal índice” y que debido a esto “fallamos en bajar esta imagen general a lo que es importante, que son las personas las que tienen que experimentar las mejores en la calidad de vida“. Además creen que “entender nuestro pasado nos ayuda a comprender mejor nuestro momento actual, a realizar mejores diagnósticos de políticas públicas y a pensar nuestro futuro”.
La rapidez con que se produjo el envejecimiento de la población chilena, la reducción de la fecundidad y los cambios en los patrones de enfermedades que vemos hoy en la población chilena”, son algunos de los aspectos que sorprendió a los economistas.
La investigación de tres años en la que estuvieron trabajando implicó retos. Los escritores de “Del centenario a los chilennials” explican que “como economistas, estábamos muy acostumbrados a analizar datos y tendencias. Sin embargo, el gran desafío fue tratar de entender las personas, las vidas y los hechos que se escondían detrás de estas cifras”. Algo que ejemplifican de la siguiente manera: “Una cosa es decir que la esperanza de vida se duplicó, pero otra distinta es reflexionar sobre qué implica que un chileno hoy viva en promedio el doble de lo que vivió alguien que nació para el centenario”.
Respecto a los descubrimientos que realizaron destacan la forma en que el desarrollo económico y de las instituciones del país se refleja en la calidad de vida de los niños. “Situaciones como la malnutrición y el trabajo infantil se han reducido continuamente a lo largo de las últimas décadas y cada vez existe una mayor preocupación por la niñez y la calidad de vida de este grupo específico“, dicen los economistas que aclaran que pese a que esto “hoy seguimos en este camino para mejorar la vida de los niños, para cuidar a los niños más vulnerables, expandir la educación temprana y mejorar su nutrición”.
Como economistas, estábamos muy acostumbrados a analizar datos y tendencias. Sin embargo, el gran desafío fue tratar de entender las personas, las vidas y los hechos que se escondían detrás de estas cifras”.
Otros cambios ocurridos durante los últimos 100 años que sorprendió a los autores es la “la rapidez con que se produjo el envejecimiento de la población chilena, la reducción de la fecundidad y los cambios en los patrones de enfermedades que vemos hoy en la población chilena“.
Los investigadores de Clapes UC explican que “estamos viviendo un envejecimiento poblacional, que está generando desafíos de adaptabilidad importantes para el sistema de salud del país, las familias, y en la sociedad en general para permitir una buena vejez“.
Respecto a la forma en que se han realizado estas transformaciones en la sociedad chilena, los economistas explican que “los cambios repentinos suelen ser noticia, pero el país ha experimentado muchos cambios que por desarrollarse paulatinamente en el tiempo no llegan a ser portada” e indican que analizar cómo Chile se ha modificado en los últimos 100 años “es darnos cuenta de todo aquello que lograron nuestros antecesores; un ejercicio que nos permite valorar lo positivo y reflexionar sobre aquellos problemas que aún nos quedan por resolver“.