Por descarte: Pichetto terminó como candidato a vice de Macri
Después de varios intentos fallidos, los principales fueron Sanz y Urtubey, el lugar del vice oficialista terminó ocupado por “el amigo peronista” que le quedaba a Macri. La apuesta es a polarizar desde el inicio y a apaciguar a los mercados.
Se terminó el misterio. Miguel Angel Pichetto será el compañero de fórmula de Mauricio Macri. El Presidente lo anunció en una serie de tuits en los que lo describió como “un hombre de Estado” y evitó mencionar que, por 12 años, fue el jefe de bloque kirchnerista en el Senado. La iniciativa tiene como objetivo terminar con el reclamo radical de mostrar “amplitud en la fórmula”. Hoy la comisión creada por la UCR para negociar lugares en las listas se reunirá con los funcionarios en la Rosada. Lo hará un día después de que Macri anunció la fórmula. Tanto los correligionarios como el sector de Elisa Carrió se mostraron a favor. Pichetto dio una conferencia por la tarde y anunció que renuncia a la presidencia del bloque del PJ.
“Cornejo, Morales y Valdés pidieron ampliar Cambiemos. Pichetto es una respuesta a ese planteo”, señalaban en la Rosada, en donde negaron que hubiera algo cerrado hasta minutos antes del anuncio de Macri.
La alternativa peronista había sido siempre parte de las hipótesis de compañero de fórmula de Macri. En primer lugar pensaron en el gobernador de Salta, Juan Manuel Urtubey, quien raudo se alejó públicamente de esa posibilidad. Con Sergio Massa yendo a un acuerdo con Alberto Fernández, la opción que restaba era Pichetto. El senador peronista negó ayer a la noche y hoy a la mañana que le hubieran ofrecido algo.
No obstante, en la Rosada confirmaron la existencia de las negociaciones. Y finalmente fue Macri el encargado de dar la sorpresa: “Los argentinos nos enfrentamos a una oportunidad histórica para consolidar nuestra democracia. En las próximas elecciones decidiremos si queremos vivir en una república o volver a un autoritarismo populista”, afirmó Macri. “Queremos una democracia con pluralismo, libertad de prensa y defensa de los derechos humanos. Queremos combatir el delito dentro de la ley sin falsos garantismos”, remarcó el presidente, en línea con las propuestas de mano dura de Pichetto.
“Para todo esto necesitaremos construir acuerdos con mucha generosidad y patriotismo donde todos los argentinos que compartan estos valores aporten desde su lugar. Por todo esto quiero anunciarles que Miguel Angel Pichetto me acompañará como candidato a vicepresidente de la Nación”, confirmó el Presidente, luego de un día de rumores. “Es un hombre de Estado, que con el correr de los difíciles años de gobierno supe conocer y respetar por su compromiso con la Patria y las instituciones”, lo elogió.
El vice
Pichetto siempre fue un hombre de consulta del Presidente y llevó adelante muchos de los acuerdos de leyes que necesitó Macri desde 2016. En los últimos tiempos, quien comenzó a explorar la posibilidad de integrarlo a una fórmula fue el ministro del Interior, Rogelio Frigerio. La jugada política de ayer, que buscó retomar la iniciativa política, tiene su firma. Y tuvo a su favor que, esta vez, no tenía la oposición del jefe de Gabinete, Marcos Peña. La conversación donde se cerró el acuerdo fue el lunes entre Pichetto y Frigerio. Luego, tras una conversación de presidente con su mesa chica, vino el llamado de Macri al senador.
Pichetto dio una extensa conferencia de prensa en el Senado, en la que se mostró en su salsa. Contó que Macri lo llamó ayer por la tarde para hacerle el ofrecimiento. “Les han repartido un conjunto de ideas de por qué acepté la propuesta del presidente de la Nación, quien tiene el poder político y tiene los votos. Inmediatamente, le dije que sí. No hubo ningún tipo de duda”, sostuvo Pichetto. “Si había alguna, creo que vale el coraje de este desafío que tiene la Argentina de salir a un camino de crecimiento, de esperanzas, de unidad nacional”.
En el documento que le repartió a los periodistas citó a otros vicepresidentes, Carlos Pellegrini, Elpidio González, Hortensio Quijano, Carlos Perette y Vicente Solano Lima, quien fue el vicepresidente de Héctor Campora desde el conservadurismo. “Esta decisión es de carácter personal. Renuncia a la presidencia del bloque del PJ. Libero a mis compañeros de este compromiso, que tuve por 17 años. A partir de ahora, mi compromiso es con esta propuesta política”, anunció.
Quizás por su parecido con Frank Underwood –el cínico protagonista de la serie House of Cards por el que ayer fue nuevamente motivo de bromas en las redes–, hizo mucho hincapié en que respetará lo que llamó “los límites del vicepresidente”. “El vicepresidente tiene que acompañar al presidente y no interferir en el poder, que está en la figura del presidente”, insistió.
Sobre sus ex compañeros de Alternativa Federal, aseguró: “Estaba decidido porque el espacio federal se había achicado notablemente. Es un escenario que se polariza”. “Le he informado a Urtubey. También a Sergio Massa. He conversado con el gobernador de Córdoba y he hablado con numerosos gobernadores del peronismo de todas las provincias. Vamos a convocar a muchos dirigentes del peronismo que están excluidos”, se envalentonó.
No obstante, indicó que no cambiará su posición sobre los fueros de los senadores (y particularmente, de Cristina Fernández de Kirchner): “La posición es la misma que he tenido siempre. No voy a modificarla”.
“Nunca es bueno que vuelva el pasado. Es un debate que tiene que ver con el destino de Venezuela, tiene que ver con la vigencia de modelos autoritarios”, aseguró Pichetto, quien consideró que “hay que jerarquizar a las Fuerzas Armadas. Hay que dejar de mirar la Argentina con la lógica de cincuenta años atrás”. Incluso citó la doctrina estadounidense de los espacios vacíos, que plantea que los espacios que deja el Estado son ocupados por el terrorismo o la delincuencia.
“Eso del consenso de Washington ya no importa en la Argentina. Acá lo que se discute es el capitalismo”, afirmó Pichetto. En un momento, debió parar de hablar unos segundos. “No estoy emocionado. Las emociones no forman parte de mi temperamento”, aseguró Pichetto, quien –no obstante– dijo que por las mañanas suele estar de mal humor y que, a veces, le dura todo el día.
El senador venía teniendo declaraciones cercanas al Gobierno incluso cuando seguía siendo precandidato opositor. Ya había dicho que en un ballottage votaría por Macri. “El ciclo de Macri termina en 2023”, había asegurado. Como ocurrió con otros candidatos, ayer circularon viejos tuits de él. En uno, decía: “El gobierno de Mauricio Macri aumentó todo y generó más incertidumbre, endeudamiento, un proceso de empobrecimiento de la clase media y de los trabajadores”.
Los aliados
Envalentonado por la victoria en Jujuy, Gerardo Morales había vuelto a insistir esta semana con ampliar la alianza Cambiemos y sugirió que se pensara en un peronista. “Un peronista sí que sumaría, yo no estaría tenso por eso”, había dicho. No dejó de mencionar a dos de sus correligionarios que podrían compartir fórmula con Macri: Mario Negri o Ernesto Sanz. Por su parte, el gobernador de Mendoza y titular de la UCR, Alfredo Cornejo, se prepara para una nueva reunión en la Rosada, que será hoy. En la última, terminó teniendo un ríspido cruce con Peña. Con el anuncio de la fórmula presidencial, la Rosada encarará las negociaciones con los radicales con una de sus demandas cumplidas. Eso sí, el lugar no fue para un correligionario.
Además de los radicales, cerca de Elisa Carrió contaron a este diario que la dirigente también fue informada antes del anuncio y que dio su visto bueno. La opción Pichetto cuenta con el apoyo del ala política del Gobierno, de la que participan tanto Frigerio como el jefe de la Cámara baja, Emilio Monzó, la gobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal y el jefe de Gobierno, Horacio Rodríguez Larreta. “Necesitamos construir acuerdos y consensos para seguir progresando como país. Acompaño y celebro la decisión del presidente Macri en designar como compañero de fórmula a Pichetto”, dijo este último. Fue una victoria sobre las propuestas de Jaime Durán Barba, que desaconsejaba un viejo dirigente político como Pichetto y proponía que la compañera de fórmula fuera mujer.