El Gobierno publica finalmente el Proyecto de Constitución y anuncia cómo será la ‘consulta’
Aprobación del Proyecto de Constitución en la Asamblea Nacional. (GRANMA)
Después de una larga espera, el Gobierno cubano ha hecho público el texto del Proyecto de Constitución que aprobó la Asamblea Nacional en su más reciente reunión.
Este texto debe ser leído y discutido en unas 135.000 reuniones de consulta, a celebrarse en centros laborales, estudiantiles, comunidades y en el exterior del país, informó Granma.
Los cubanos podrán adquirir el texto impreso, que será vendido a un peso (moneda nacional) en todos los municipios durante esta semana, en la medida en que se vayan distribuyendo los ejemplares del tabloide editado al efecto.
También se puede descargar desde los sitios web de los principales medios de difusión e instituciones oficiales.
Hasta este lunes, se reunieron en La Habana unos 280 representantes de las estructuras oficialistas de todo el país, quienes recibieron explicaciones de la comisión del Partido Comunista que redactó la nueva Constitución, acerca de cómo procesar la información de las propuestas que salgan de la consulta.
Las reuniones en centros de trabajo, estudio y en los barrios serán «conducidas» por más de 7.600 dúos de funcionarios, seleccionados por las autoridades de cada territorio, y que recibirán preparación para realizar ese tutelaje.
Granma no ofreció otros detalles acerca de cómo se está organizando la consulta, que se extenderá del 13 de agosto al 15 de noviembre venideros, y durante la cual se espera que los ciudadanos ofrezcan sus criterios y sugerencias a partir del texto revelado este martes.
El diario del Partido Comunista tampoco explicó cómo se realizará la consulta en el exterior.
Al finalizar el proceso, el texto tendrá que regresar a la Asamblea Nacional, que debe asentar los cambios sugeridos por la ciudadanía. La versión definitiva será sometida a referendo en fecha aún por definir.
Este proceso ha sido muy criticado por diversas instituciones del exilio, quienes lo han calificado como una maniobra encaminada a «legalizar el régimen de los militares» y a «proteger los intereses» y «poder de la familia» de los Castro.