El triunfo de Milei en Argentina deja tocado y malherido al socialismo hispanoamericano
Zapatero, Bachelet y Menchú pidieron poner «freno a las posturas antidemocráticas de Milei», pero ahora, tendrán que tragar amargamente la voluntad popular
Cristina Fernández de Kirchner arropada por Rodrigues Zapatero y Rafael Correa en Buenos Aires – Luis Robayo / AFP
Ni la penúltima elección en la región, en la que el correísmo salió derrotado frente a un joven empresario, generó tanta expectación y polarización en Hispanoamérica como la contienda presidencial argentina. Obviamente el peso regional de Argentina es mucho mayor que el de Ecuador, además, el peronismo y especialmente el kirchnerismo han sido parte de la piedra angular del Foro de Sao Pablo y más recientemente el Grupo de Puebla que trata de reinventar el Socialismo del Siglo XXI.
En la región se habla del famoso efecto de péndulo, aquel efecto que, buscando el equilibrio, lleva que la ideología de los gobiernos pase de la derecha a la izquierda y viceversa de cuando en cuando. Una sola elección no es suficiente para afirmar que la tendencia regional marca un giro hacia gobiernos de derecha, pero ya son tres: Ecuador (por un período limitado para terminar el mandato de Guillermo Lasso) Colombia en unos comicios municipales y regionales que dieron la espalda a Gustavo Petro y ahora Argentina con Javier Milei.
El próximo año están previstas las elecciones de dos gigantes: México, donde no parece previsible una derrota del partido de Andrés Manuel López Obrador y Venezuela, donde la dictadura de Nicolás Maduro parece dispuesta a ir a una guerra con Guyana antes que enfrentar en las urnas a la líder opositora María Corina Machado.
El retorno del péndulo regional hacia la derecha está por verse con contundencia en 2024, sobre todo en México donde todavía las urnas mandan y no los fusiles como en Venezuela, sin embargo, a la espera de esa confirmación, está claro que el triunfo de Milei en Argentina deja tocado y mal herido al socialismo hispanoamericano.
Tal fue el golpe a la izquierda regional, a los «zurdos de mierda» diría el presidente electo de Argentina, que Petro no pudo mantener la diplomacia que exige ser un jefe de Estado, que se lamentó con efusivo pesar en redes sociales: «Ha ganado la extrema derecha en Argentina (…) Triste para América Latina…»
En contraste, el expresidente colombiano Iván Duque felicitó a Milei y publicó: «triunfó de la Democracia y se venció el populismo, la demagogia y al Grupo de Puebla».
Precisamente Duque, junto a Mario Vargas Llosa y Mariano Rajoy llamaron a votar por el libertario, luego de que José Luis Rodríguez Zapatero, Michelle Bachelet y Rigoberta Menchú hicieran lo mismo por el oficialista Sergio Massa.
Duque, Vargas Llosa y Rajoy no dudaron en advertir del riesgo de «la continuidad de un modelo económico corporativo fracasado que mantiene a Argentina en el estancamiento» en referencia a un posible triunfo de la apuesta peronista y kirchnerista.
Por el contrario, Zapatero, Bachelet y Menchú hicieron un llamamiento a poner «freno a las posturas antidemocráticas de Milei», pero ahora, tras el claro mensaje de las urnas, tendrán que tragar amargamente la voluntad popular expresada por los argentinos.
Sin duda, la elección de Argentina es un parteaguas (como nos gusta decir en la región) que deja cojo a los foros regionales de izquierda; por lo pronto habrá que esperar un poco más para ver si también quedan mancos si México finalmente despierta y retoma la senda del sentido común.