Grupo Ávila: Condenamos enérgicamente el atropello de la guardia costera de Trinidad que asesinó a un niño venezolano
El trágico suceso ocurrido recientemente en las aguas limítrofes ente Venezuela y Trinidad que ha costado la vida a un infante de un año sostenido en el regazo de su madre es un episodio que merece el más profundo rechazo y atribución de culpas y responsabilidades. Se trata de una violación flagrante a las normas de derecho internacional y de los instrumentos internacionales de protección de los derechos humanos.
Más allá de lo anterior, cabe igualmente una responsabilidad al régimen de Nicolás Maduro y de la línea de mando que -ilegítimamente- despacha y responde a Miraflores. Son ellos quienes con sus políticas insensatas han llevado al país al colapso económico y a la crisis social además de haber permitido y avalado la existencia de una dictadura corrupta violadora de los Derechos Humanos. El resultado de ello es la emigración irrefrenable de más de seis millones de personas algunas de las cuales se ven en la necesidad de afrontar dramáticos riesgos para lograr su propósito. Tal el caso de quienes se ven precisados a utilizar frágiles embarcaciones como es el caso que nos ocupa.
Igual responsabilidad recae en las mafias y demás grupos ilícitos que organizan esas peligrosas travesías que ya han producido numerosas víctimas. A ellos no los anima otro propósito que no sea lucrar con el sufrimiento de personas casi siempre vulnerables, todo ello sin tomar las mas elementales medidas de seguridad en la navegación.
La tercera responsabilidad debe atribuirse al gobierno de Trinidad/Tobago el cual a lo largo de mas de dos décadas de crisis en Venezuela ha mostrado disposición complaciente hacia la dictadura además de haber puesto en práctica una ultra-restrictiva política de inmigración en perjuicio de nuestros compatriotas la cual tiene como lamentable epílogo el que hoy comentamos La trágica ejecución esta vez estuvo a cargo de un buque guardacostas artillado, que haciendo uso desproporcionado de la fuerza, interceptó y disparó contra la embarcación que transportaba a los migrantes venezolanos. Suena contradictorio entonces que el mismo día en que se produce el incidente coincida con la llegada a suelo venezolano del señor Desmond Dillon, nuevo embajador de Trinidad acreditado ante el gobierno ilegítimo que perpetra el señor Maduro.
Exigimos una investigación pronta y exhaustiva que conduzca a la determinación de los responsables y las sanciones a los autores.
Caracas, 8 de febrero de 2022