La pandemia del coronavirus empieza a pasar factura a la coalición de PSOE y Unidas Podemos
La crisis del coronavirus tiene un claro efecto político. Casi cinco meses después de las elecciones, PSOE y Podemos están afrontando el momento más delicado para la coalición, y la pandemia les está pasando factura. Esa es la principal conclusión de la encuesta de DYM para 20minutos. –ya el CIS publicó su barómetro de marzo, en plena crisis, y otorgó un 31,9% de intención de voto al PSOE, 12,3 puntos por delante del PP–. Si hoy se repitieran los comicios, el PSOE volvería a ganar con un 26,8% en intención de voto, pero con 1,2 puntos menos que en noviembre. Es el principal perjudicado en plena pandemia. Por su parte, Unidas Podemos se quedaría en un 11,8% (perdería un punto). La formación política más beneficiada estas semanas es el PP: Pablo Casado saldría reforzado y obtendría un 23,1% de los votos, mejorando en 2,3 puntos el resultado del 10-N. La diferencia entre PSOE y PP quedaría reducida a un 3,7 puntos (en noviembre fue de 7,3 puntos.
Vox aguanta el tipo. Los de Santiago Abascal seguirían siendo tercera fuerza con un 14,4% de los votos, a pesar de perder 0,7 puntos respecto a las elecciones. Estarían justo por delante de Unidas Podemos. La crisis del Covid-19 también ha está reforzado a Ciudadanos, aunque no le permite escalar posiciones. En la primera encuesta con Inés Arrimadas como presidenta, la formación naranja obtendría un 7,2% en intención de voto, lo que supone una subida de un 0,5 puntos.
La crisis también afecta a la llamada fidelidad de voto. El PSOE conservaría el 73,2% de los votantes que les eligieron el 10-N. No es el partido que más fideliza. Ese calificativo es para el Partido Popular: volverían a votarles el 81,5% de los ciudadanos que usaron su papeleta en los últimos comicios. Vox, por su lado, alcanzaría un 74,3% de fidelidad, mientras que Unidas Podemos conservaría el 70,7% de sus votantes. Ciudadanos tendría el voto más volátil: obtendría un 57,1% de fidelidad en caso de que hubiera ahora elecciones.
El Gobierno está muy lejos de aprobar por su gestión de la crisis del coronavirus. Recibe una nota de 3,9 sobre diez en cuanto a su forma de hacer frente a la pandemia. Los que mejor valoración dan al Ejecutivo son los votantes de Unidas Podemos (una nota de 5,7), y también le aprueban los electores del PSOE (5,5). Quienes dicen ubicarse en la izquierda y en el centro izquierda también dan el visto bueno a la labor de Pedro Sánchez. Por contra, las notas en el caso de los votantes de derecha y centroderecha son bajísimas. Las peores valoraciones son las que emiten los electores de Vox (1,9 de nota). El PP da un 2,3, mientras que Ciudadanos otorga un 3,2, valoración muy cerca de la media general.
Los líderes políticos no están a la altura. Todas las cabezas visibles de los partidos políticos suspenden en plena crisis del coronavirus. Pedro Sánchez es el mejor valorado con un 3,9 de nota, seguido de Inés Arrimadas con un 3,7 y de Pablo Casado con un 3,5. Pablo Iglesias obtiene un 3 y Santiago Abascal se queda, como el peor valorado, en un 2,7.
Sánchez solo aprueba entre los votantes del PSOE (un 6) y de Unidas Podemos (5,5). Casado y Abascal son los que consiguen mejor nota entre los votantes de su partido, que les dan un 6,7. Iglesias obtiene un 6,1 entre los suyos. Arrimadas, por su parte, logra un 6,1 entre los electores de la formación naranja.