En universo informativo que rodea a Venezuela, pocos se han detenido en que la negociación en México, va para su tercera ronda. Noruega y México, junto con Holanda y Rusia, y un grupo de pares venezolanos van para su tercera reunión, lo cual de por si ya representa un avance. En las anteriores rondas el tiempo común era corto y poco productivo, acá ya han sacado dos documentos y puede que entre el 24 y 27 de septiembre próximos, las reuniones nos den otra aproximación.
Es cierto que han tenido propuestas como la de incluir a ese peculiar personaje, que se conoce como Alex Saab, un barranquillero, de origen sirio, cuyos ancestros deben haber llegado a la “Puerta de Oro de Colombia”, en los años en que se cocinaban los amores de Fermina Daza y Florentino Ariza, que García Márquez describió entre fiebres en su: “Amor en los tiempos del cólera”. Alex, es un personaje de novela de Pérez-Reverte, uno de los bandidos que trafica entre las tramas de Falcó, que cambia monedas, vuela en jets privados, y hoy está en Estambul y cena en Dubai, para amanecer en Moscú y ganar montañas de dinero a costillas del hambre venezolana. Pero eso es anecdótico, aunque usted no lo crea.
Parte de las razones por las que no se ha roto la estrategia negociadora, es porque ya no se puede más; hay que parar y acordarse, seis millones de venezolanos caminan por el mundo recordando los horrores de Nicolás, quien ha podido ser un gran presidente y optó por una mala versión cubana. Que del diálogo, saldrá una solución, como la que todos queremos, imposible, porque hay 30 millones de soluciones. Basta que encuentren una común, que haga menos difícil la vida de los nuestros; #PatriaYVida estimados.
