Jesús Torrealba
La oposición venezolana dijo el miércoles que el diálogo con el Gobierno quedó congelado luego que representantes del presidente Nicolás Maduro no asistieran a dos reuniones pautadas la noche del martes.
Con la mediación del Vaticano, ambas partes iniciaron conversaciones formales a fines de octubre y acordaron establecer mesas técnicas continuas para priorizar el abastecimiento de medicinas y alimentos, en un país sumido en una aguda crisis económica y política.
También acordaron reunirse periódicamente para evaluar los avances de las comisiones. El próximo encuentro estaba pautado para el 6 de diciembre.
“Puedo confirmar que el Gobierno, de manera irresponsable, congeló el proceso de diálogo al dejar de asistir a dos reuniones de la comisiones técnicas convocadas para anoche (martes)”, dijo a Reuters Jesús Torrealba, secretario ejecutivo de la coalición opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD).
El Gobierno no respondió de inmediato a una solicitud de información de Reuters.
En la última reunión, del 11 de noviembre, las facciones firmaron un acuerdo de convivencia y acordaron buscar solución al desacato dictado por la justicia sobre el Parlamento. Para ello, la oposición cedió, y desincorporó a tres diputados objetados por el Tribunal Supremo.
Como gesto a las conversaciones, la oposición también enfrió su agenda de protestas y el Gobierno de Maduro liberó a un puñado de políticos detenidos y considerados por la oposición como “presos políticos”.
Sin embargo, el mayor énfasis de la oposición ha estado en intentar presionar al Gobierno para eliminar las trabas que ha puesto el órgano electoral para convocar a un referéndum revocatorio del mandato de Maduro, que culmina a principios del 2019.
“El Gobierno, utilizando como excusa el debate que se hizo ayer (martes) en la Asamblea Nacional sobre el juicio por narcotráfico donde fueron declarados culpables (los sobrinos de la primera dama), se levanta de la mesa”, dijo el líder opositor Henrique Capriles.
“El Gobierno se burla del Papa (…) y queda en evidencia frente al mundo que ellos son los que no quieren diálogo”, agregó.
La Asamblea Nacional, de mayoría opositora, debatió en la víspera sobre la reciente condena de los sobrinos de la primera dama, Cilia Flores, hallados culpables en una corte de Estados Unidos de intentar traficar cocaína para obtener una dinero que ayudaría a su familia a mantenerse en el poder.