Feijóo convierte el clamor contra la amnistía en un mitin masivo
El líder del PP exige la retirada de la norma y la convocatoria de elecciones. Los populares se dan un baño de masas con Aznar y Rajoy presentes
El Partido Popular (PP) venía los últimos días rebajando las expectativas de su manifestación contra la amnistía por lo que pudiese pasar. Era una concentración, un acto de la formación, para criticar la deriva del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y, de paso, tomar impulso hacia los comicios europeos. Las sensaciones este domingo, desde luego, han sido óptimas para rematar una semana tan fantástica para los populares como ‘horribilis’ para el Ejecutivo. Alberto Núñez Feijóo, ante decenas de miles de personas –80.000 según el PP, 20.000 según la Delegación del Gobierno en la Comunidad de Madrid–, ha exigido la disolución de las Cortes y la convocatoria de elecciones.
En un ambiente festivo, acompañado por la temperatura preestival en Madrid, veintitrés grados centígrados, el PP se ha dado un baño de masas que no se han querido perder los expresidentes del Gobierno José María Aznar y Mariano Rajoy. Tampoco los jefes de los Ejecutivos autonómicos populares, la secretaria general del partido, Cuca Gamarra, el portavoz en el Congreso, Miguel Tellado, ni los candidatos en las europeas del 9 de junio Dolors Montserrat y Esteban González Pons.
Faltaba media hora para el inicio del acto, previsto a mediodía, pero que ha arrancado más de veinte minutos tarde por la afluencia masiva de gente, cuando un pinchadiscos, convertido en improvisado ‘speaker’, reclamaba a los asistentes concentrados en la desembocadura de la calle Alcalá en la plaza de la Independencia que continuasen hacia Cibeles, para evitar el colapso. Sonaban mientras ‘hits’ como ‘Todo de ti’, de Rauw Alejandro, y ‘Madrid City’, de Ana Mena. Pero el himno de la jornada, con respeto del nacional, que ha coronado el final del evento, ha sido ‘La Puerta de Alcalá’, de Ana Belén, con su «mírala, mírala, mírala» entre intervención e intervención.
Han tomado la palabra el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida; el filósofo Fernando Savater, quien cierra de forma simbólica la lista del PP el 9J tras su apoyo a UPyD y Ciudadanos en el pasado; la opositora venezolana María Corina Machado, por vídeo; y la presidenta de la Comunidad de Madrid, deleite del público, Isabel Díaz Ayuso. Todos ellos han ejercido de teloneros de Núñez Feijóo, recibido a gritos de «presidente, presidente», quien pronto ha convertido ese clamor contra la amnistía en un mitin multitudinario de cara a las elecciones europeas.
«No a los muros, no a los totalitarismos, no al fascismo, no al comunismo. Esta es la casa de todos, carajo»
Isabel Díaz Ayuso
Presidenta de la Comunidad de Madrid
Los alrededores de la Puerta de Alcalá, anegados de banderas de España y de la Unión Europea (UE), y también del PP, han interrumpido la vida cotidiana en ese punto de la capital hasta que el líder de la oposición ha rematado su discurso sin ánimo de ocultar el tinte electoral de la concentración contra la amnistía: «Nos vemos el 9 de junio».
«Retire la ley»
«El 9 de junio vamos a votar todos por España, por la democracia y por la libertad», ha arrancado Núñez Feijóo, en unas palabras que, de no ser por sus predecesores, habrían hecho pensar al más despistado que se trataba de un mitin al uso y no de una protesta contra el Gobierno. Pero cuando agonizaba ya la intervención del líder de los populares, se ha arremangado para retar a Sánchez: «Ya que tanto le gusta cambiar de opinión, los giros de guion y está el país parado, le pido que retire la ley de amnistía, disuelva las Cortes y convoque elecciones para que nos deje hablar, porque nos ha engañado a todos, incluidos los suyos».
Legalmente, Sánchez no puede disolver las Cortes hasta el miércoles porque tiene que pasar un año desde la última convocatoria de elecciones. De hacerlo, los comicios se celebrarían en julio. Asimismo, el líder del PP le ha exigido la retirada de la norma que regula el olvido legal del ‘procés’, que el Congreso aprobará el jueves de manera definitiva, al levantar el veto impuesto por el Senado, donde los populares cuentan con mayoría absoluta. «Retire la ley de amnistía y consulte a todos los españoles», ha insistido Núñez Feijóo.
Fuentes del PP incidían en esa idea al finalizar la manifestación: «Si la vas a aprobar y no vas a poder gobernar, ¿para qué la vas a aprobar? Hace unos meses el debate era si se daba impunidad a cambio de gobernabilidad, ahora es si se da impunidad a cambio de nada». Desde Génova remarcan el vía crucis del PSOE esta semana, con el rechazo de su ley contra el proxenetismo el martes y la retirada de la ley del suelo el jueves ante la falta de apoyos. «Es la derrota más grave de los últimos tiempos», zanjan.
«He cambiado muchas veces de partido, pero estoy aquí porque aquí están España y la democracia»
Amnistía aparte, a Núñez Feijóo le ha servido la jornada para inyectar moral a los suyos. La victoria holgada del PSC en Cataluña no está reñida con el crecimiento del PP en esa comunidad autónoma y ahora los populares se lanzan a un triunfo contundente en Europa que le envíe un mensaje a Sánchez. Es por ello que el presidente popular ha tratado de visibilizar este domingo una suerte de plebiscito; una segunda vuelta de las generales.
Los noes y los síes
«Hay que hacer de estas elecciones la mayor manifestación que ha existido en España. El 9 de junio tenemos que decir no a la desigualdad, a la injusticia, al abuso, a los desmanes, a la mentira, al puto amo». Esto lo decía Núñez Feijóo con pausa, porque cada consigna era coreada con un ‘no’ unísono del público. Después, ha llegado el turno de los ‘síes’: «Sí a la igualdad, a la independencia de la Justicia, a la libertad de pensamiento, a la libertad de expresión, a la libertad de información, a la dignidad, al futuro juntos y a España». «¡Ya está bien de que los españoles pongamos la otra mejilla, vamos a poner el voto el 9 de junio!», ha clamado.
«Cuando se pierde la libertad, es muy difícil recuperarla después»
María Corina Machado
Opositora venezolana
Lanzado, Núñez Feijóo se ha recreado en un acto multitudinario que le ha permitido exhibir un músculo que, a día de hoy, ningún otro partido puede igualar. «Jamás se ha hecho nunca en España en una campaña de las elecciones europeas. En ninguna de las veintisiete naciones se va a conseguir», ha augurado, y ha justificado tal afluencia por el hartazgo con «la arrogancia, la mentira y el egoísmo» del presidente Sánchez. «Nos quieren siervos», se ha quejado, espoleado por unos asistentes que han celebrado que Núñez Feijóo, en una expresión a la que no acostumbra, haya insistido en que el secretario general del PSOE, por mucho que diga el ministro Óscar Puente, no es«el puto amo».
El presidente del PP ha criticado el «teatrillo» de Sánchez con su carta, que le mantuvo «desaparecido» cinco días, ha tachado de «provocación» que diga que la economía va «como un cohete», ha arremetido contra la ruptura de relaciones con Argentina y ha lamentado la «improvisación» de reconocer deprisa y corriendo el Estado de Palestina.
Lo hizo, según él, «no por convicción, sino porque tenía que comparecer en el Congreso para dar explicaciones sobre la corrupción de su partido, de su Gobierno y de su entorno». Ese último cuchillo, con el nombre y apellido de Begoña Gómez, la esposa de Sánchez, investigada en un juzgado de Madrid por presunto tráfico de influencias, lo ha expresado de forma mucho más explícita antes que él Díaz Ayuso, quien ha subrayado que está la lupa sobre ella «por actividades en calidad de mujer del presidente del Gobierno». La jefa del Ejecutivo madrileño, que ha dicho sufrir un «señalamiento» sanchista, ha recuperado su polémica frase: «Me gusta la fruta». Eco en el público.
La presidenta de la Comunidad de Madrid se ha mostrado firme y contundente contra la ley de amnistía, de la que renegaba el PSOE antes de las elecciones. «Es la ley más nefasta de la democracia, un acto de impunidad y corrupción vergonzoso, una ley indigna y letal para España», ha dicho, y ha acusado a Sánchez de dividir en dos el Poder Judicial: el bueno, ese que según ella ha necesitado meses para «encajar con vaselina» el olvido legal del ‘procés’; y el malo, el de los «fachas con toga».
Savater, muy aplaudido, ha empezado justificando su apoyo a un nuevo partido –el filósofo hace cinco años cerraba la lista de Ciudadanos–, y ha terminado con el público en el bolsillo: «He cambiado muchas veces de partido, pero siempre me he basado en dos cosas: España y la democracia. Y por eso estoy hoy aquí: porque aquí están hoy España y la democracia». El también escritor, activista contra el nacionalismo primero en tiempos de ETA en el País Vasco, luego contra el independentismo catalán, ha defendido que no cabe reconciliación con quien no quiere reconciliarse.
«No a Pedro Sánchez, no a sus secuaces, no a desguazar España, no a romper España por la puerta de atrás», ha enumerado por su parte el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, quien ha advertido a los asistentes que ellos no necesitan «cinco días», como Sánchez, para pensar su futuro: «El 9 de junio hay elecciones europeas y ‘tu voto es la respuesta’». Lema del PP en la campaña de las europeas con calzador, y a seguir: «La ‘sanchosfera’ es la corrupción política de vender España por siete votos, la corrupción institucional de los Tezanos y compañía, y la corrupción económica del caso Koldo». En un guiño a Venezuela, país del que se veía alguna enseña entre los manifestantes, ha intervenido también la opositora María Corina Machado, con una férrea defensa de la libertad.
