Casi el 70% de los argentinos respalda la gestión de Macri, pero demanda resultados
El nuevo gobierno mantiene la confianza de la mayoría de la población, que entiende que necesita tiempo para resolver los principales problemas; la situación económica es la mayor preocupación y supera a la inseguridad
Los primeros 100 días de gestión de Mauricio Macri generaron tanta expectativa como demandas entre los argentinos. Esa conclusión se desprende de una encuesta realizada por Poliarquía Consultores en exclusividad para LA NACION, que midió -entre otras cosas- el pulso del nuevo gobierno ante la opinión pública durante la primera semana de marzo.
El 69% de los encuestados considera que está «aprobada» la gestión del Presidente, mientras que el 29% opina lo contrario. El respaldo se recuesta en que casi la totalidad de los votantes que lo eligieron en las elecciones generales ratificaron su apoyo. Incluso, el Gobierno consigue el respaldo del 83% de los votantes de Sergio Massa y hasta el 30% de los que acompañaron a Daniel Scioli. «Eso explica por qué la aprobación de Macri hoy es casi el doble de los votos que recibió en los comicios de octubre», explicó Alejandro Catterberg, director de Poliarquía Consultores.
Los primeros 100 días de Macri en la Casa Rosada fueron intensos: liberó el cepo al dólar e impulsó una devaluación, avanza en un acuerdo con los holdouts, realizó despidos masivos en el Estado, abrió el diálogo con gobernadores y dirigentes opositores e impulsó la modificación del impuesto a las ganancias.
«Desde que asumió Néstor Kirchner, en 2003, no se ve un nivel de expectativa como los que se observan ahora. Es un elemento que Macri debe administrar con cuidado porque es muy difícil pensar que pueda sostenerse este nivel de expectativas cuando el porcentaje de la población que considera que la situación del país es buena es muy bajo en este momento», argumentó Catterberg.
A pesar del respaldo generalizado al nuevo gobierno, los encuestados sostienen que el país no atraviesa el mejor presente. El 43% cree que la situación general de la Argentina es «regular», el 30% califica a la coyuntura como «negativa» y mientras que otro 26% afirma que es «positiva».
La mirada a largo plazo, sin embargo, genera más esperanza. El 64% de los entrevistados cree que la situación mejorará, el 10% sostiene que seguirá igual y el 23% advierte que empeorará.
A la hora de enumerar los problemas, la situación económica se lleva el 51% de las preocupaciones. Incluso, por primera vez le saca una clara ventaja por sobre la inseguridad.
La inflación (21%) y el desempleo (14%) son los temas que más afectan a los argentinos, detallaron los encuestados. Los problemas de inseguridad completan el podio, con el 20%. La corrupción, uno de los temas que más ocupa la agenda de los medios de comunicación en los últimos años, en especial durante los últimos meses del kirchnerismo, preocupa sólo a un 3%.
Crédito a futuro
El crédito a futuro se repite también ante la consulta por la capacidad de gestionar del Gobierno. El 66% de los encuestados cree que Cambiemos «sabe cómo resolver los problemas del país, pero necesita tiempo», mientras que el 24% considerá que «no sabe cómo resolver los problemas» de la Argentina.
El Presidente concentra su apoyo en la ciudad de Buenos Aires, uno de sus bastiones electorales, donde cosechó un 74%, cinco puntos por sobre su promedio. En la provincia de Buenos Aires, el distrito más poblado del país, su aprobación baja diez puntos hasta el 64%. En las regiones centro y norte consiguió el 69% y el 72%, respectivamente.
Macri junto con María Eugenia Vidal son los dirigentes políticos mejor considerados, ambos con el 62% de imagen positiva, según la encuesta de Poliarquía. La mandataria, incluso, le saca una leve ventaja al tener sólo un 9% de imagen negativa, ítem donde el Presidente asciende hasta el 20%.
Vidal enfrentó serios problemas durante sus primeros días en La Plata, el más recordado es la fuga de los hermanos Lanatta y de Víctor Schillaci, que puso bajo la lupa el accionar de su gestión en materia de seguridad, un aspecto clave en territorio bonarense.
«Sin dudas, Vidal es la nueva figura más destacada de la política argentina. Se ha transformado en una nueva dirigente destacada por su altísimo nivel de conocimiento y aprobación a nivel nacional», afirmó Catterberg.
Sergio Massa, uno de los líderes de la oposición, está tercero con el 58% de imagen positiva, lugar que comparte con la vicepresidenta Gabriela Michetti. Por debajo están Horacio Rodríguez Larreta (42%) y Elisa Carrió (36%),
«Hay cuatro dirigentes de Pro entre los cinco con mejor imagen. Claramente, este espacio está con el visto bueno de gran parte de la sociedad», agregó el director de Poliarquía.
En el otro extremo, la ex presidenta Cristina Kirchner sorprende al registrar un 48% de imagen negativa, una tendencia en ascenso durante el último semestre de 2015 y que continuó cuando dejó la Casa Rosada. La supera su hijo Máximo Kirchner, con el 51%. La imagen negativa de la ex mandataria sólo superó los actuales registros al comienzo de su segunda gestión, cuando acechaban todavía los coletazos de la crisis financiera de 2008 y el conflicto con el campo.
«El cristinismo ha perdido apoyo en los últimos meses desde que el Frente para la Victoria perdió las elecciones. La imagen positiva de la ex presidenta se redujo en más de 12 puntos», sostuvo Catterberg.
Sólo superan a los Kirchner Aníbal Fernández con el 63% de desaprobación popular y Amado Boudou con el 64%, ambos en el fondo de la tabla.
Poliarquía consultó telefónicamente a 983 argentinos entre el 1 y el 8 de marzo para esa encuesta, que tiene un margen de error del 3,19%.
La evaluación del gobierno
