Declaración del EAJ-PNV sobre la condena a Leopoldo López y la situación política en Venezuela ante las elecciones

Ante la condena impuesta por los tribunales de la República Bolivariana de Venezuela a Leopoldo López en el contexto de la crítica situación política que vive el País, agudizada por el tenso clima preelectoral, EAJ-PNV manifiesta:

Primero.- Secundamos los pronunciamientos de Amnistía Internacional y de Human Rights Watch al calificar la sentencia condenatoria –13 años y 9 meses de prisión– de absolutamente desproporcionada, teniendo en cuenta que las acusaciones contra su actuación carecen de un sólido soporte probatorio y que, por consiguiente, en el proceso judicial seguido se han cometido graves violaciones a los derechos del procesado.

Segundo.- Denunciamos que esta injusta sentencia refleja un salto cualitativo en el deterioro creciente de los frágiles cimientos democráticos que han caracterizado al Gobierno venezolano, reflejado en este caso en la manifiesta ausencia de la separación de poderes y en la instrumentalización del sistema judicial al servicio de la venganza política contra Leopoldo López, dirigente de la oposición y preso político cuya inmediata liberación exigimos. Esta reclamación de derechos y libertades la hacemos extensible al conjunto de los presos políticos en Venezuela, entre los que figura el alcalde de Caracas, Antonio Ledezma, en prisión desde el pasado mes de febrero.

Tercero.- Apelamos a la responsabilidad sobre todo del Gobierno venezolano, pero también de la oposición y de los agentes sociales del País, para que las elecciones legislativas convocadas para el 6 de diciembre se puedan celebrar en un clima de paz y libertad y cuenten con todas las garantías democráticas necesarias para que el resultado electoral constituya el inicio de la conformación de una reconciliada y estable Venezuela.

Cuarto.– Solicitamos asimismo de la comunidad internacional, especialmente del sistema interamericano –OEA y UNASUR–, que desde el ejercicio de su responsabilidad y el respeto a la Constitución de Venezuela contribuya a que el proceso electoral se desarrolle en términos de equidad y justicia para que, definitivamente, la reconciliación, la paz, la libertad y el desarrollo social y económico de Venezuela se recuperen en un futuro próximo.