El fracaso abre la pugna por repartir las culpas en Podemos
La dirección de Podemos está desconcertada. Un día después de las elecciones, prefirió no ofrecer una explicación del fracaso electoral. Y la decepción abrió una disputa interna, sobre todo entre los sectores afines a Pablo Iglesias e Íñigo Errejón, para atribuir las culpas. “En este momento, nadie sabe por qué el resultado no ha sido el que daban las encuestas. Y nosotros tampoco”, afirmó el portavoz de la ejecutiva, Pablo Echenique, tras más de dos horas de reunión. La formación, que concurrió a las elecciones en coalición con IU, encargó un estudio para determinar qué falló.
¿Cómo influyó en el resultado la alianza con IU? ¿Sirvió para frenar una caída todavía más drástica? ¿Tenían razón Pablo Iglesias y Alberto Garzón, defensores del pacto? ¿Falló Errejón, que diseñó la campaña? ¿Cómo influyó el Brexit? De momento, todas estas preguntas quedan sin respuesta oficial. Pero el día posterior a las elecciones, en la reunión de la cúpula, presidida por Iglesias, empezó el debate interno. Lo reconoció el propio Echenique. “Se han vertido en la ejecutiva muchas opiniones. Una cosa y la contraria”, dijo. Todos aseguran que el mal resultado que le valió a Unidos Podemos 71 escaños —los mismos que lograron Podemos e IU por separado el 20-D— se debe a muchos factores.
Pero los sectores próximos a ambos dirigentes se repartieron las culpas en canales del servicio de mensajería Telegram. “Anoche, tras un resultado desolador y comprobar que 5+1, no eran 6 sino que eran 5 e incluso menos, Pablo Iglesias, de manera precipitada, nos dijo que el camino, ese camino que no ha permitido desbancar al Partido Popular, ni al PSOE, es el correcto. ¿Por qué?”, se lee en un mensaje de Pueblo, Patria, Podemos, un grupo de seguidores de Errejón. “¿Queremos seguir siendo Podemos? Esa es la pregunta que muchos deben hacerse tras escuchar las palabras de ayer de nuestro secretario general”.
Monedero y Errejón
Un canal de afines a Iglesias señala, en cambio, el diseño de la campaña electoral, responsabililidad de Errejón. “Quizás la campaña ha estado demasiado dominada por la contención, por evitar dar miedo y al final hemos evitado dar motivos para votar”, opina un grupo llamado Los muchachos de la coleta. “Hay que valorar si se ha dirigido hacía la realidad o ha estado viviendo de espaldas a ella. Si la dirección de esta campaña no ha estado marcada por el espejismo demoscópico que nos han producido los medios de comunicación del adversario”.
El cofundador de Podemos Juan Carlos Monedero fue el único en criticar abiertamente la estrategia de Podemos. Monedero cree que Podemos “ha sido rehén del infantilismo” y se ha creído las encuestas. Monedero defiende la alianza, pero carga contra el proyecto de Podemos y la campaña de Errejón, con quien mantiene una disputa ideológica. “No basta hacer un discurso hueco, adornado con una labia simpar y embellecido con el oropel de las televisiones si no planteas una alternativa clara”, escribió, tajante, en un artículo publicado en su blog. Jorge Moruno, responsable de Podemos próximo a las tesis de Errejón, manifestó su disconformidad con ese argumento en Twitter. “Hablar de marketing versus contenido es una excusa para volver a la izquierda”, consideró.
ASTURIAS Y ZARAGOZA, A LA CABEZA DEL FIASCO
Con el 100% del voto escrutado, la alianza entre Podemos e IU perdió 1.062.862 votos de los logrados entre ambos por separado en diciembre. El desplome en sufragios fue mayor en Asturias (seis puntos menos de voto respecto a diciembre) y Zaragoza (cinco puntos y medio menos).
El caso de Asturias es paradigmático porque allí Gaspar Llamazares, exlíder de IU y portavoz en el Parlamento regional, se opuso desde el principio al acuerdo Podemos-IU. El clima se agravó cuando Podemos concedió a IU el tercer puesto en la lista, que la federación consideró una “humillación”, dado su peso en esa comunidad. En Zaragoza, el acuerdo con Podemos no logró sumar a la Chunta Aragonesista.
